La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Maó denegó ayer una petición de licencia para abrir una estación de servicio en el polígono industrial.El proyecto contemplaba la instalación de una serie de surtidores de carburantes en un solar sin edificar de la calle Olivar, del tipo de los que se han abierto junto a algunos establecimientos dedicados a otras actividades como la venta de alimentos. Este terreno se encuentra junto a la rotonda que conecta la tercerca fase con la cuarta.
Desde el Consistorio mahonés informan que la denegación de la licencia se produce porque el proyecto no se ajusta a los parámetros urbanísticos de la zona, tal como han acreditado los técnicos municipales. Cabe recordar que a mediados de la pasada década se produjo, en poco tiempo, una proliferación de gasolineras denominadas low cost, con precios más ajustados que las estaciones de servicios convencionales y, en algunos casos, sin presencia permanente de personal.
Segunda piscina
En otro orden de cosas, una única oferta se ha presentado de forma correcta al concurso público para la redacción del proyecto de construcción de una segunda piscina pública en el polideportivo municipal de Maó. Dos más han sido descartadas por cuestiones de forma.De este modo, esta iniciativa da un paso más para convertirse en realidad, después de haber pasado por diversas complicaciones.
La última fue el recurso presentado a los pliegos de condiciones por el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, al entender que se excluía a estos profesionales de la opción de participar en la licitación. Pese a ello, la única propuesta que se ha aceptado para el concurso no cuenta con técnicos en ingeniería en su equipo.