El diputado de Més per Menorca, Josep Castells, interpeló al Govern sobre si la modificación de la Ley de Turismo abordará el problema de la masificación. La pregunta se formuló durante la sesión de control ayer en el Parlament Balear, en la cual la presidenta Francina Armengol respondió que hace seis años que el ejecutivo autonómico trabaja para diversificar la economía para restar «dependencia del turismo».
Sin embargo, es esta dependiencia, defendió la presidenta, que hace necesario que las Islas sigan siendo «líderes en temas turísticos», base sobre la cual se enfoca la reforma de la normativa, aunque coincidió en que se debe apostar por la «calidad y no por la cantidad».
«La covid ha demostrado que cuando la actividad turística ha parado, la situación nos ha ido muy mal y cuando hemos podido reactivar la economía turística las cosas van mucho mejor», explicó la presidenta del Govern.
También destacó que la normativa «ha de suponer un plus añadido a la industria de las Islas en términos de sostenibilidad ambiental y temas sociales».
El diputado de Més también relacionó la llegada de trabajadores de fuera con la subida de los precios del alquiler: «Cuantos más turistas han venido, más pobreza ha habido en Balears». Y concluyó que si el Govern «pone límite» al crecimiento turístico, tendrá el apoyo de su grupo parlamentario.
Armengol discrepó con el análisis sobre el problema de la vivienda y achacó la subida de precios a que gente de fuera compra segundas residencias, «y no por los trabajadores que vienen a trabajar». La presidenta pidió corregir este discurso a Més.
En cambio les parece bien la masificación por Sant Joan y votaron en contra de limitarlo. La coherencia no va con ellos.