Los últimos seis años han sido para Vicky Archer de idas y venidas al hospital y de recaídas de una enfermedad que contrajo, asegura su familia, a raíz de la picadura de un mosquito durante unas vacaciones en Menorca en 2016, encefalitis autoinmune. Desde entonces esta joven, que ahora tiene 20 años, ha pasado un calvario con síntomas como erupciones en la piel, inflamación, pérdida de pelo, problemas para hablar y retener información, dolores de cabeza y fatiga cognitiva. Este caso vuelve a ser noticia, según recoge la cadena inglesa ITV News West Country, por su ingreso a principios de año en el hospital de Bristol, donde se someterá a más pruebas para determinar el tratamiento para su dolencia, algo que ha impacientado a su familia.
La madre de la joven, Alison, asegura en declaraciones a itv.com, que la situación de su hija es «horrible» y «traumática». Antes de su ingreso en enero explica que la chica acudió al hospital en varias ocasiones desde noviembre de 2021. «Están esperando a hacerle más pruebas, aunque lleva ya seis años de test, las pruebas se están retrasando y los médicos dicen que no le tratan hasta conocer los resultados para asegurarse de que es una encefalitis, pero ya ha tenido esto antes y es su séptima recaída desde 2016», explica a este medio británico.
Por parte del hospital responden que «las condiciones de algunos pacientes son complejas» y que «ofrecerles el mejor tratamiento y cuidado es nuestro objetivo prioritario». El caso de Vichy Archer saltó a los medios británicos en 2016, ya que se hicieron eco de la llamada desesperada de la madre para que se hiciera una resonancia magnética a su hija; ya entonces asociaba la enfermedad a la picadura del mosquito durante su estancia en la Isla. Lo cierto es que en otras zonas de España, como Asturias y Cantabria, sí se detectó en 2018 una nueva especie de mosquito invasor que transmite el virus del Nilo, que puede provocar encefalitis; en 2020 se registraron casos de esta enfermedad transmitida por mosquitos en Andalucía, pero en Menorca no se han tenido noticias de esta especie ni de casos como el de la joven británica.
En esta isla con esto de las restricciones por todo y las prohibiciones ni se fumiga. Está prohibido fumigar por la fauna. Eso si, aqui con unos mosquitos de la mierte, que da igual que nos muramos. Que vergüenza para nosotros y para los turistas a ciertas horas de la tarde no se puede ni salir a la calle. Ni que estuviéramos en ella selva.