Més per Menorca apunta directamente al Govern como responsable de la crisis de gobierno de Consell, con el que se ha roto el pacto de gobierno de izquierdas. Le acusa de «chantajear» y «amenazar» al Consell para que se paralice la Ley de a Reserva de la Biosfera y a Susana Mora de aceptarlo, después de que la presidenta suspendiera el pleno previsto para este lunes que tenía que aprobar el borrador de la ley para posteriormente ser remitido al Parlament balear para que lo aprobara definitivamente.
En una rueda de prensa en la que han participado los tres consellers de Més y los siete directores insulares, los responsables de Més han insistido que todos ellos presentaran este lunes su dimisión, aunque antes de su comparecencia no lo habían hecho. Eso sí están dispuestos a reconsiderar su postura si Susana Mora convoca el pleno para aprobar la Ley, y los ecosoberanistas acceden a que el borrador de la ley vaya al pleno insular con las modificaciones pertinentes para poder incorporar las peticiones del Ministerio y se comprometen, estén dentro o fuera del equipo de gobierno, votar a favor.
Més ha cargado todas las culpas al Govern, y a la «nota jurídica» que ha presentado el Ejecutivo, cuestionando la parte competencial de la ley. De hecho, ponen fecha, nombres y apellidos del estallido de la crisis, que según ellos explotó a partir del miércoles el conseller balear de Medio Ambiente, Miquel Mir (Més per Mallorca) y la consellera de Presidencia, Mercedes Garrido (PSOE) se desplazaron a Menorca «para parar la ley». Més afirma que hasta la reunión del miércoles el equipo de gobierno iba a la una, y tras el encuentro desde el PSOE Menorca se empezaron a poner reparos para aprobar el borrador de la ley y al final Susana Mora decidió suspender el pleno.
Contra la imposición de Mallorca
El portavoz de la formación econacionalista, Josep Juaneda ha asegurado que «los consellers y diputados haremos todo lo que esté en nuestras manos para aprobar la ley, pero cabe pedirle al PSOE y a Unidas Podemos el modelo de isla, económico y territorial que quieren. Nosotros lo tenemos claro, por ello dejamos nuestras sillas, porque creemos que Mallorca no debe imponernos el modelo. Somos coherentes y consecuentes con lo que desde el primer día pactamos con el resto de formaciones del equipo de gobierno», ha argumentado.
«Nosotros no nos vamos porque se haya pospuesto quince días un pleno, nos vamos porque el PSOE y Unidas Podemos han aceptado las amenazas del Govern, modificar el documento antes de su aprobación por pleno, y el documento estaba consensuado y presentado por tres partidos del equipo de gobierno», ha aclarado.
El vicepresidente de la institución, Miquel Maria, ha acusado al Govern balear de chantajear a su formación para rebajar el contenido de la ley.
«Los tambores de guerra de Palma sonaban desde hace semanas y el pasado martes la presidenta del Consell nos dijo que se aproximaba un choque de trenes y que si tenía que elegir entre el Govern y los socios de gobierno tenía clara su lealtad y que se enfrentaría al ejecutivo autonómico», ha relatado.
«El miércoles tarde se reunieron dos consellers del Govern (Mercedes Garrido, de Presidencia, y Miquel Mir, de Medio Ambiente) con representantes de cada partido, y el compromiso de la presidenta desaparece y nos plantean un chantaje. Es mentira que haya un informe jurídico del Govern, sí una nota jurídica de urgencia sin firmar. La consellera que vino de Palma nos dijo que si desconvocábamos el pleno y le dábamos tiempo para negociar, la nota no existiría», ha añadido.
Maria ha asegurado que el análisis jurídico del Govern evidencia las intenciones del PSOE de Mallorca: «Pretenden eliminar de la ley los artículos sobre traspaso de competencias».
«Cuestiona el derecho de Menorca a tener una gestión diferenciada y prohíben que el Consell decida a qué proyectos destinar la dotación económica que acompaña la ley, y que sea el Govern quien condicione las partidas», ha criticado.