El parking de Gala Galdana, situado a la derecha del puente frente al hotel del mismo nombre mantendrá su capacidad actual de 190 vehículos un verano más por la demora en la ejecución del proyecto inicial de ampliación que data de enero de 2021. Esa reforma supondrá la disponibilidad de otras 66 plazas para vehículos en el mismo espacio, además de la reubicación de la parada de autobuses, en la que cabrán tres vehículos de estas características, entre otras mejoras.
El Consell explicó ayer que la obra ha tenido que posponerse hasta el próximo otoño por la demora de la demarcación de Costas a la hora de conceder la autorización, puesto que la reforma incluye una pequeña parte del parking cuya titularidad corresponde a este organismo. Costas notificó que no se podía talar uno de los árboles lo que obligó a modificar el proyecto y ralentizar todo el proceso. Esta parte corregida supondrá la pérdida de cuatro plazas que aparecían en las previsiones iniciales, con lo que a las 190 actuales se sumarán 66 que dejarán la cifra final en 256 aparcamientos.
Según el departamento de Movilidad de la institución insular, la autorización de Costas se ha recibido en las últimas semanas, pero dado que la temporada estival se echaba encima, se ha tomado la decisión de postergar la obra hasta el próximo otoño. «No podíamos hacerla ahora porque ya no había tiempo; aunque no se trate de una reforma de envergadura sí que habríamos inutilizado el parking parcialmente», ha señalado la consellera del área, Francesca Gomis. El plazo de ejecución de la remodelación que se licitará tras el verano es de dos meses y medio. El expediente del proyecto revisado está ahora en exposición pública.
El proyecto de reordenación y ampliación del parking de Cala Galdana, elaborado conjuntamente con los técnicos municipales de Ciutadella, contempla la retirada de todos los parterres que lo delimitan en cada una de sus parcelas. De esta forma se ganan 66 plazas nuevas para vehículos, otras tres para autobuses. Entre ellas habrá seis para coches eléctricos con punto de recarga, otras ocho para vehículos de personas con movilidad reducida y un espacio para estacionar bicicletas.
El presupuesto de la obra se había fijado en 285.969 euros pero la modificación del proyecto y el aumento de costes de material obliga a revisarlo y se elevará hasta los 350.000 euros aproximadamente. La reordenación se financiará con parte del fondo de compensación por la quiebra del touroperador Thomas Cook, de 1,4 millones de euros, destinado a la modernización de urbanizaciones.
Consell y Ayuntamiento de Ciutadella, ya que el aparcamiento se halla al otro lado del torrente, en la zona de Serpentona que pertenece al término municipal ciutadellenc, firmaron un convenio en enero de 2021 para que el ente insular llevara a cabo la remodelación.
La reforma quedará circunscrita al perímetro actual que ocupa el aparcamiento e incluirá, además, la renovación de todo su pavimento, incorporación de la parada de autobús para poder mejorar la movilidad en esta zona, y la seguridad tanto vial como de los peatones.
El parking de Cala Galdana, por tanto, continuará un año más exhibiendo sus imágenes habituales de saturación debido a la masiva afluencia de turistas. El Ayuntamiento de Ferreries solicitó al Consell el año pasado que aumentara las frecuencias del transporte público para conseguir reducir la llegada de vehículos privados que colapsan todos los aparcamientos de la urbanización.