A partir del 1 de junio el Ayuntamiento de Es Castell empezará a aplicar la nueva ordenanza de aparcamiento de vehículos, que supondrá la prohibición de estacionar en el centro para los no residentes en el municipio. El Consistorio empieza esta semana a repartir los distintivos que deberán lucir los que están exentos de una prohibición que se extenderá hasta el 30 de septiembre y que se limitará a un periodo de tiempo que va de las 18 horas hasta la medianoche.
El Ayuntamiento informó este martes en detalle de los casos en los que sí se permitirá el aparcamiento. Los únicos que no deberán realizar ningún trámite ante la administración local y que recibirán automáticamente la tarjeta serán aquellos que sean propietarios de vehículos que liquiden el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica en el municipio. El resto deberán acreditar que cumplen algunas de las siguientes condiciones: empadronados que sean titulares de un vehículo de alquiler, propietarios de segundas residencias y empadronados que justifiquen un cambio de la dirección fiscal del vehículo del que son titulares. Hasta ahí las tarjetas de tipo A, gratuitas y con una vigencia de dos años. Las tarjetas de tipo B, con cuatro meses de vigencia y un coste de 10 euros incluirán a servicios técnicos y de reparación, trabajadores con certificado de empresa que acredite el contrato y que su horario coincida con el de la restricción, clientes de establecimientos hoteleros dentro de la zona regulada (se concederán solo tarjetas para el cinco por ciento de las camas del hotel), así como cualquier situación análoga.