El aparcamiento de Cala Figuera, en el puerto de Maó, lleva unos diez días cerrado por obras en plena temporada turística. En concreto la actuación corresponde a tareas de asfaltado de la parcela. Además, según informan desde Autoridad Portuaria de Balears, se está aprovechando para llevar a cabo una campaña de análisis geotécnicos del terreno de cara a la ejecución, en el futuro, de los nuevos servicios náuticos contemplados en esta ubicación.
La previsión actual de Autoridad Portuaria es que las obras acaben la semana que viene. Ahora mismo se está acondicionando el suelo, luego se acometerá el aglomerado propiamente dicho y finalmente se pintarán las plazas de estacionamiento. Hasta ahora la parcela no estaba asfaltada.
La ejecución de estos trabajos en pleno julio supone que no se puedan emplear las plazas de aparcamiento cuando más demanda hay por la afluencia de turistas en el puerto de Maó, donde estacionar no es nada sencillo en determinadas horas del día. Para compensar, solo en parte, esta circunstancia se ha habilitado una pequeña zona para dejar vehículos en la franja donde estaban algunas propiedades que se derribaron tras ser adquiridas por Autoridad Portuaria, a unos pocos metros de distancia.
Seis años abierto
El parking de Cala Figuera se abrió en 2017, con capacidad para un centenar de plazas. La demora de la ejecución del complejo de servicios náuticos previsto en este punto ha conllevado que el aparcamiento se consolide, con un alto nivel de uso sobre todo durante los meses de verano. La medida entonces coincidió con la implantación de la zona azul y naranja, de pago, en buena parte de las plazas de aparcamiento del puerto de Maó.
Desde Puertos no concretan los motivos por los que la actuación se realiza en plena temporada turística.