El Ministerio de Defensa ha reaccionado con relativa celeridad a las quejas planteadas sobre el estado de la infraestructura de San Isidro y ha renovado los somieres y colchones del acuartelamiento. A través de un contrato menor, valorado en 5.418 euros, ha adjudicado a Comella y Pons SL el contrato para el suministro del citado material. A la licitación, convocada por la Jefatura de Intendencia de Asuntos Económicos Este del Ejército de Tierra, habían concurrido dos proveedores.
Las carencias que presentaban las instalaciones militares fueron denunciadas por los sindicatos policiales a principios de verano cuando 30 policías nacionales llegaron en comisión de servicios como refuerzo para la temporada de verano. A falta de alojamiento y la desocupación que presenta el cuartel se les ofreció este lugar, austero en sus condiciones pero con la exigencia mínima de de habitaciones para dos personas con baño propio.
Sin embargo, el mal estado de los colchones e incluso las condiciones de salubridad provocó la denuncia y la búsqueda de un alojamiento alternativo.
Aquí hay una serie de elementos que tienen una especie de obsesión enfermiza en contra de nuestras Fuerzas Armadas y las Fuerzas del Orden. Ahora les parece mal que se hayan sustituido unos viejos camastros seguramente en estado deplorable, por unos somieres y colchones decentes para el necesario descanso de los miembros de la policía que vienen de refuerzo en verano. Me gustaría ver lo que les parecería a esos criticones si tuviesen que dormir ellos en unos colchones sucios y hechos polvo. Luego cuando tengáis un problema ya os gustará que esa policía que tanto odiáis venga a solucionaros el asunto con rapidez y eficacia.