El pleno municipal de la noche de este jueves en Ciutadella aprobará definitivamente la modificación de la ordenanza reguladora de los horarios de establecimientos comerciales en el casco antiguo. Será con división de opiniones entre los distintos grupos municipales, en relación con la obligatoriedad de los bares y restaurantes de contar con seguridad privada para continuar abiertos de la 1.30 a las 3 de la madrugada.
PSM y Unidas Podemos - Gent x Ciutadella sacarán esta jornada adelante los cambios introducidos en la ordenanza municipal que regula los horarios de la oferta turística complementaria, espectáculos públicos y actividades recreativas. Lo harán pese a los cuatro votos contrarios de sus socios de gobierno del PSOE, que consideran que «afecta de forma negativa y general a bastantes establecimientos del casco antiguo que tienen actividades diferenciadas, como bares y restaurantes, respecto de los establecimientos con actividad musical». Así lo apuntaba este miércoles la edil Noemí Camps, quien considera que «tener a una persona que controle entradas y salidas», no solo no servirá para «disminuir los ruidos en la calle», sino que, por otro lado, hay que recordar que «no es una competencia de los establecimientos».
De las alegaciones recibidas, como por ejemplo las de la Asociación de Cafeterías, Bares y Restaurantes de PIME Menorca, la concejal de Disciplina Gubernativa, Maria Jesús Bagur, apunta que se han tenido en cuenta las que pedían concreción sobre las zonas afectadas. Esto se traduce en que deberán tener vigilancia privada aquellos establecimientos ubicados en la zona de influencia del Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico-Artístico de Ciutadella (Pepcha). Eso es, básicamente de Contramurada hacia adentro.
Si no hay cambios de última hora, Partido Popular y Ciudadanos se abstendrán. Desde la formación naranja, Isa León justifica el voto neutral en que «no es un paso atrás, sino que es una propuesta que ayuda». Sin embargo, «es un parche», el problema necesita «ir más allá», para hacer «cumplir las ordenanzas vigentes». Algo que solo será posible si se resuelve «un problema real de falta de policías locales, que hace siete años que gobiernan para solucionar», pero aún así «no es suficiente».
Por último, Juana Mari Pons, del PP, recuerda que ellos ya habían presentado una moción al respecto, porque «tenemos muchas quejas de vecinos que no pueden dormir». Y esto va «supeditado a la falta de policías, y hay que encontrar una solución». En cualquier caso, «esto, como siempre, lo pagarán los empresarios» con los vigilantes que se verán obligados a contratar para suplir la ausencia de agentes municipales.