El informe emitido desde la Conselleria de Medio Ambiente del Govern que ordena de la retirada de la escultura instalada por la artista Nuria Román en la playa de Mongofra, denominada 'La aguja de la giganta', contrasta con la presencia a pocos metros de una construcción en ruinas sobre la que, en principio, no hay acciones en marcha en el mismo sentido.
Esta edificación, abandonada y en primera línea de mar, es conocida como caseta des senyor y la utilizaban los propietarios de la finca para disfrutar de los baños en el mar con todas las comodidas. En la actualidad carece ya de techo y está muy deteriorada, situada a apenas unos metros de la ahora cuestionada obra de arte.
El informe y la resolución que ha firmado el director del parque natural de S'Albufera des Grau insta a la retirada de la escultura porque, según afirma, degrada el paisaje, se encuentra en un Área de Conservación Predominante y en una zona de elementos biológicos de importancia excepcional, sensibles a actividades humanas.
Un criterio que no comparte el Consell de Menorca, que ha presentado alegaciones para defender la permanencia de «La aguja de la giganta» en el mismo lugar donde fue ubicada hace diez años. Entienden desde el gobierno insular, y a diferencia del Govern, que «aporta valor añadido al paisaje natural de la playa» de Mongofra.