El temporal de viento ocasionado por la borrasca Gérard ha dejado en Menorca rachas de hasta 85 kilómetros por hora y olas de 8,3 metros en la bocana del puerto de Maó. La mayor intensidad del viento ha tenido lugar entre las 7 y las 8 horas de la mañana.
El mal tiempo ha obligado a cerrar al tráfico el puerto de Ciutadella, que está inoperativo desde medianoche a todos los buques, después de que el lunes se clausurara solo para los barcos de más de 130 metros de eslora. Ello ha provocado la cancelación, ya desde el lunes por la noche de los trayectos previstos en las rutas con Alcúdia y Barcelona.
Por su parte, el puerto de Maó está abierto y el buque ‘Martín i Soler' de Baleària, procedente de Barcelona que tenía que amarrar en Son Blanc, ha sido el único trayecto marítimo operado en Menorca, pero ha tenido que ser desviado a Maó. El otro trayecto con la ciudad condal, operado por la compañía Trasmed, ha sido cancelado por el mal tiempo.
Menorca está este martes en alerta naranja por viento y fenómenos costeros, y el miércoles seguirá vigente el aviso por mala mar.
De una borrasca a otra
Tras el paso de Gérard se aproxima otra borrasca, Fien, con la que se prevé una entrada de aire ártico a partir de la noche de este martes y mañana del miércoles, con una entrada de aire ártico que provocará una bajada brusca de temperaturas (con mínimas de 4 grados) y lluvias durante lo que queda de semana.