Las obras de reforma de la calle de Es Ramal de Alaior han levantado sus primeras ampollas. La tala de algunos árboles ubicados en la vía para su sustitución han motivado quejas tanto políticas como de algunos vecinos quienes lamentan que «se hayan arrancado sin ningún tipo de esmero y partiéndolos con las máquinas excavadoras, negándoles de una posible segunda vida», tal como se pronuncia un ciudadano en una misiva que se reproduce en una carta al lector de la edición de hoy.
Tanto Junts per Lô como PSOE también se han pronunciado al respecto solicitando «una manera más humana de tratar los árboles y trasplantarlos correctamente como habían prometido a vecinos y comerciantes» y agregan que «las imágenes son lamentables».
Nueva vida en Es Llargandaix
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alaior defiende la actuación al indicar que el proyecto elegido y votado por los vecinos durante el proceso de participación ciudadana «ya contemplaba la sustitución de la mitad de los árboles por otros que realicen más sombra en la vía».
En concreto, se van a sustituir los ubicados a la derecha de la vía en dirección ascendente hasta la plaza de Es Ramal y los de la izquierda de la parte superior de la avenida. Se trata de en torno a 16 ejemplares. Con ello, el equipo de gobierno avanza que cuando se concluya el proceso de reforma de la avenida «habrá los mismos o más árboles que antes de las obras, no se eliminan ejemplares, solo se sustituyen».
Además, el Ayuntamiento ha decidido dar una segunda vida a una parte de estos árboles que se están sustituyendo. Se ubicarán en la entrada del municipio, en concreto, en las proximidades de la rotonda de Es Llargandaix. No obstante, no va a ser posible trasplantarlos todos por la complejidad del proceso y el espacio disponible en la zona elegida.
A las quejas por la tala de los árboles se suman las críticas por el aparcamiento. Algunos vecinos indican que además de eliminar las plazas del Carrer des Ramal también se han suprimido otras por la coincidencia de las obras de adecuación del nuevo aparcamiento en la antigua fábrica Timoner España.