Desde hace una semana, aproximadamente, entre 10 y 15 camiones repletos de rocas llegan al puerto de Ciutadella procedentes de Alcúdia. Transportan las piedras necesarias que se están utilizando para reforzar el espigón identitario de la bahía de Fornells y la construcción de un martillo en su extremo. Se trata de un eslabón más de la magna obra de reforma del puerto que debe estar concluido antes de la Semana Santa, según compromiso adquirido ante comerciantes y restauradores de este núcleo rural.
En total, los camiones han de trasladar a Fornells vía marítima 7.000 toneladas de estas rocas que responden a unas características determinadas, según el proyecto que ejecuta Ports de les Illes Balears por fases. El hecho de que esta clase de piedra específica, fundamentalmente una roca caliza más dura, no se encuentre disponible en Menorca motiva que tengan que ser transportadas desde dos canteras de Mallorca, Sa Torre, en Manacor, y Son Tafona, en Mancor de la Vall, lo que supone una cambio importante en la logística de los trabajos, al tiempo que los encarece por razones obvias. Esta contingencia, no obstante, ya estaba contemplada en el presupuesto, han explicado fuentes de la constructora.
En los ensayos practicados se concluyó que las rocas a utilizar en el espigón de Fornells debían de superar las pruebas de desgaste de los ángeles. Una máquina que lleva ese nombre determina la resistencia a la trituración o abrasión de los materiales pétreos utilizados en las mezclas asfálticas, y además se realizan test de compresión y líquidos que la penetren para que sean más resistible a la erosión. Al no haber disponibilidad de esa roca en Menorca, Ports las ha adquirido a las dos canteras mallorquinas.
Cada piedra cortada pesa entre dos y dos toneladas y media, y cada camión transporta entre 24 y 27 toneladas. El traslado de las rocas queda supeditado, estos días, al temporal de viento, aunque, en principio, la finalización de las obras del Passeig Maritim de Fornells deben estar terminadas en Semana Santa, como explicó la entonces gerente de Ports, Cristina Barahona, a los comerciantes y restauradores el pasado octubre.
Posteriormente se reanudarán los trabajos marítimos que no deben implicar molestias para visitantes y residentes, hasta el 15 de junio cuando volverán a paralizarse las obras. Al término de la temporada turística las máquinas entrarán de nuevo en Fornells para solventar los desniveles en el vial que deben poner fin al proyecto.
El apunte
Santa Bàrbara, la única cantera en la Isla con esta piedra, paralizada por Medio Ambiente
La única cantera insular que podía obtener esta clase de piedra para el espigón y el nuevo martillo de Fornells es la de Santa Bàrbara, entre Binixems y Alaior, pero se encuentra parcialmente paralizada por la Conselleria de Medio Ambiente debido a una declaración desfavorable de mediados de 2021. El terreno del que se puede extraer este tipo de piedra caliza de gran dureza ocupa una Zona de Especial Protección de Aves ZEPA. La paralización está recurrida por la empresa que explota la cantera ante el Juzgado tribunal Contencioso Administrativo de Palma, que aún no ha resuelto.