Belén López Martínez es delineante interina del Consell desde 2008. «Llevo 15 años esperando que se convoque la oposición a mi plaza para poder ganarla en propiedad», explica.
Transcurrido tanto tiempo desde su ingreso, la solución extraordinaria arbitrada por el Gobierno, señala Belén, «me parece correcta, aunque yo creo que les han obligado a hacerlo desde la Unión Europea». La técnica del Consell precisa que, en la empresa privada, «tras dos o tres años de trabajo, ya te convierte en trabajadora fija».
La opción de poder obtener una plaza de funcionario de carrera a partir de un concurso de méritos, comprende que genere rechazo entre quienes la ganaron con una oposición natural. «Es así, conozco gente que tuvo que prepararse la oposición hace sólo uno o dos años y ahora ven como otros pueden lograr lo mismo sin examinarse». En su caso, recuerda que tuvo que pasar una prueba teórica y otra práctica para entrar como interina.
«Lo correcto habría sido que se convocara la oposición cuando entré, pero ninguna administración lo ha hecho bien, hay gente que lleva 20 años de interina». Afirma Belén que «ahora tengo 51 años y no es lo mismo estudiar un temario con esta edad que con 30». Por todo ello «agradezco que se nos dé esta opción sin olvidar que se puede presentar cualquiera», precisa, aunque no esté en la administración, siempre que disponga de la titulación requerida y del nivel de catalán exigido en cada plaza.
En el caso de no ganarla por ninguna de las dos vías, lo único garantizado es una indemnización de 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 anualidades.