El Govern ha iniciado expediente sancionador contra cuatro establecimientos de comida rápida ubicados en Menorca por infringir la normativa en materia de residuos. Se trata de los dos Burger King de Ciutadella y Maó, del McDonald's y el Telepizza, ambos en la ciudad de Llevant. Cada uno de ellos se enfrenta a una sanción de 20.000 euros por incumplir la Ley de Residuos aprobada en 2019.
Los expedientes se refieren a actas de inspección levantadas entre octubre y diciembre del año pasado por los inspectores del departamento de Ordenación Turística del Consell y tramitadas por la Conselleria balear de Medio Ambiente y Territorio. En las mismas se denuncian diversos incumplimientos de la citada legislación como el uso de productos alimentarios monodosis (básicamente salsas y otros condimentos), la presencia de utensilios de un solo uso para consumo de comida y bebida en el mismo local (platos, cubiertos, vasos, bandejas), la ausencia de elementos compostables en los materiales entregados a los clientes para el consumo fuera del establecimiento, la presencia de servilletas no reutilizables y la inexistente posibilidad de llevarse a casa la comida sobrante, entre otros incumplimientos de la normativa vigente en materia de residuos.
Pueden presentar recurso
Las deficiencias denunciadas están tipificadas como infracción grave, con sanciones que se pueden mover entre los 9.000 y los 300.000 euros. La sanción propuesta por el Govern es de 20.000 euros y da 15 días para que las empresas encargadas de los establecimientos presenten alegaciones o bien se beneficien de descuentos en las multas en el caso de aceptarlas y renunciar a cualquier recurso. Estos, junto a otros abiertos en el resto de islas, son los primeros expedientes que se conocen por el incumplimiento de la estricta ley balear en materia de residuos que se aprobó hace cuatro años.
El apunte
Más de tres años de margen para que se adaptaran a la nueva normativa
La Ley de Residuos de Balears se aprobó a finales de febrero del año 2019. Pero en muchos de sus preceptos no era de aplicación inmediata. Concedía un plazo de dos años a los establecimientos para que se adaptaran a los cambios normativos, entre ellos la eliminación de todos los productos monodosis o la introducción de productos reciclables y compostables. Las inspecciones que han motivado la apertura de expediente se realizaron por parte del departamento de Ordenación Turística del Consell entre octubre y diciembre del año 2022, por lo que los restaurantes han tenido más de tres años desde que se aprobó la ley hasta que han sido inspeccionados. Ahora pueden recurrir o aceptar la multa con un descuentos de al menos un 20 por ciento.