El Consell de Administración de Ports IB ha aprobado, a las puertas del cambio de gobierno, las bases del concurso para otorgar la concesión administrativa destinada a construir y explotar cinco pantalanes en el puerto de Fornells, que hace unos días motivó las quejas del PP de Es Mercadal y Fornells por «vulnerar la ley de buen gobierno» e «ir en contra de la normativa vigente, que da prioridad a entidades y usos que potencien la parte social».
Según informa Ports IB a través de un comunicado de prensa, el concurso se dividirá en cinco lotes, uno por cada pantalán, y el plazo de la concesión será de diez años. El concesionario, explica la institución, asumirá todos los costes que se derivan de la redacción del proyecto, la instalación de los pantalanes, la inclusión de los servicios de luz y agua, así como de residuos y otros gastos adicionales y necesarios.
Además, cada lote será objeto de una concesión independiente. Es decir, si bien los licitadores podrán presentar diferentes ofertas para diferentes lotes, únicamente podrán ser adjudicatarios de un solo lote y, por tanto, de un solo pantalán. Deberán, asimismo, asegurar un máximo del 15 por ciento de los amarres totales para embarcaciones en tránsito y un porcentaje máximo del 25 por ciento para embarcaciones registradas en la lista sexta (destinadas a fines lucrativos y comerciales). Hay que recordar que con la remodelación total del puerto habrá un incremento de 77 amarres.
El apunte
Los vecinos se reúnen este martes para debatir sobre el estado del puerto
«Fornells, justicia portuaria» es el lema que da nombre a la reunión que va a concentrar a distintos vecinos y personas usuarias del puerto de Fornells este martes a las 20.30 horas en la Sala Multifuncional de Fornells.
«Hace falta un planteamiento colectivo y una articulación de acciones conjuntas», declara el escrito con el que los convocantes dan a conocer la celebración de esta reunión.
Los motivos que alegan en ese mismo documento son la problemática de la falta de amarres para muchos residentes, el coste elevado para usar las instalaciones portuarias durante los meses de temporada alta y la previsión de la administración balear de cara al verano que viene.