En Es Mercadal están surgiendo quejas por el servicio de taxi, con relación a los trayectos con inicio o final en lugares como Cala Tirant. Según los reclamos, que ya han llegado al Ayuntamiento, los taxistas rechazan recorrer los últimos dos kilómetros hasta la urbanización y recogen o dejan a sus clientes donde acaba el asfalto, en el cruce del Camí de Tramuntana. Una alternativa que ofrecen es llevarlos a Platges de Fornells, desde donde «tuvimos que atravesar la playa en plena noche y sin luces», hasta los apartamentos, explica un afectado.
Estas quejas las han trasladado los usuarios al Ayuntamiento de Es Mercadal. Allí, el alcalde Joan Palliser señaló a este diario que tienen previsto concertar una reunión con el sector del taxi, con el fin de buscar una solución a estas deficiencias en el servicio, cuando se trata de viales «de propiedad privada» como es este caso, u otros como Binimel·là, donde también hay quejas, según expuso el primer edil.
Al parecer, el inconveniente es por el estado del firme, bacheado, con piedras y polvo. De esta problemática es consciente el Consistorio, donde su alcalde recordó que, a pesar de tratarse de una camino particular, mantienen un acuerdo con los titulares para adecuarlo regularmente.
Por otro lado, respecto a la titularidad del camino, el Consistorio está pendiente de la Demarcación de Costas «para que autorice el deslinde», teniendo en cuenta que transcurre junto a la zona inundable de las Basses de Lluriach.
Mal camino
Desde Taxis Menorca confirmaron ayer que, para los servicios que se requieren a o desde Cala Tirant, se informa a los clientes de que el trayecto es hasta el final del camino asfaltado, lo que supone que deben completar a pie el último tramo, de unos 2 kilómetros.