El nuevo equipo de gobierno de Ciutadella reforzará el área de Urbanismo para intentar acabar con el actual colapso que padece el departamento, que provoca largas demoras en la concesión de las licencias de obras. «No es aceptable que el Ayuntamiento tarde un año y medio en conceder una licencia de obra», asegura el concejal de Urbanismo, Joan Benejam.
En el próximo pleno, convocado para la semana que viene, el gobierno de Ciutadella presentará el programa temporal con el que pretende convocar un concurso para contratar a un arquitecto y un abogado, con «el objetivo de mejorar el servicio». No se trata de cargos de confianza, apunta Benejam. «En Urbanismo falta personal y tenemos la dotación porque hay plazas vacantes», afirma el regidor. La contratación de estos refuerzos será para un año, prorrogable a un segundo y por un máximo de tres años. Benejam calcula que el proceso puede durar unos dos meses, por lo que entre mediados de septiembre y principios de octubre el Ayuntamiento ya podría contar con los dos trabajadores.
Como se recordará, el refuerzo de Urbanismo fue uno de los principales motivo de la ruptura horas antes de la investidura del pacto entre las fuerzas de izquierda, ya que el PSOE exigía la contratación de dos cargos de confianza en el área, precisamente un arquitecto y un abogado, y el PSM estaba dispuesto a aceptar uno como máximo.
El gobierno del PP cree necesario reforzar esta área no solo para agilizar las licencias, que también, sino porque es importante acabar de desencallar el Plan General de Ordenación Urbanística, y a la vez pretende modificar también el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico Artístico (PEPCHA) de Ciutadella.
Oficina urbanística, abierta
Además del refuerzo de personal en esta área, el gobierno de Ciutadella ha anunciado que próximamente abrirá cada día la oficina de Urbanismo, situada en la plaza de Es Born, para «poder ofrecer una atención más personalizada y gestionar diferentes consultas y trámites de la ciudadanía». En estos momentos, la oficina funciona mediante cita previa y con un horario limitado abierto al público sin cita. A partir de ahora, matiza Benejam, «no se va a eliminar la cita previa, pero no tiene sentido de que por ejemplo un arquitecto de Madrid venga a Ciutadella y si no lo ha solicitado previamente no se le atienda».