El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ciutadella confía en que el Plan de Gestión Sostenible del Agua, que la normativa le exigía tener ya en 2019 y que ayer aprobó inicialmente, sirva para desencallar la tramitación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana. Cabe recordar que, como avanzó este diario, la Dirección General de Recursos Hídricos volvió a informar desfavorablemente sobre el nuevo plan urbanístico al entender que no se garantiza el suministro de agua para poder atender la demanda de los nuevos crecimientos previstos.
El documento aborda precisamente esta cuestión e intenta justificar que con la batería de medidas que se introducen sí será posible garantizar el suministro de la población con los desarrollos previstos en hasta veintiséis zonas urbanas. El nuevo responsable del área de Urbanismo, Joan Benejam, explicaba ayer que no está previsto renunciar a ninguno de los desarrollos del nuevo plan urbanístico, pero también matizaba que en el escenario planteado por Recursos Hídricos «es como si todos los desarrollos se hicieran de golpe y lógicamente no será así, tenemos años por delante».
La posibilidad de tener que renunciar a algún desarrollo urbanístico había sido planteada por el anterior responsable municipal de Urbanismo y por la propia ex directora general de Recursos Hídricos del Govern, en el caso de que finalmente no se pudiera justificar que se podría garantizar la cobertura de las necesidades hídricas. Ahora será la Dirección General de Recursos Hídricos la que tendrá que volver a informar sobre el nuevo plan general, cuyo retraso en la aprobación definitiva hizo que el municipio tuviese que volver al planeamiento de 1991.
Los trámites todavía pendientes
Benejam recuerda, no obstante, que el paso de Recursos Hídricos es solo uno más y no el primero en una tramitación a la que todavía le falta mucho camino. Cabe tener en cuenta que el Consistorio tiene antes que adecuar el plan general a ese nuevo documento de gestión hídrica para poder avanzar. Habrá que ver qué dice al respecto la Dirección General de Recursos Hídricos.
Después deberá pasar el filtro de la Comisión Balear de Medio Ambiente, más tarde lograr los informes sectoriales, dar respuesta a las 200 alegaciones que todavía están sin contestar y llevarlo a pleno para aprobación provisional para que lugo sea el Consell quien le de el visto bueno definitivo. Entre todo el Consistorio calcula que será necesario entre año y año y medio.