Cuando se anunció la lista electoral del PP de Menorca para su asalto al Consell, muchas miradas se pusieron en Joan Pons Torres, como consecuencia de sus controvertidos posicionamientos en prensa. Además, la controversia sobre los contratos del IME alimentó todavía más el debate sobre el futuro de esta institución.
¿Se ha encargado o encargará una auditoría extra en el IME?
-Es un organismo que recibe financiación pública y se debe mirar si cumple o no con el rigor exigible a cualquier administración.
¿Bastan los informes que pasaron por el pleno?
-¿El que firmaron el propio conseller y la directora? No.
Dentro del IME hay atención, cierta inquietud, hacia la figura del conseller de Cultura. ¿Están justificadas? ¿Encaja el Joan Pons Torres en el perfil moderado que usted anunció para el equipo de gobierno?
-Encaja perfectamente. Nunca había visto tantos ataques, incluso personales, a un cargo antes de empezar a gobernar.
La gente sabe lo que piensa el conseller a través de sus artículos en prensa.
-No tiene nada que ver. Se pueden criticar las acciones de gobierno. Todo esto forma parte de la política del miedo que han intentado algunos sectores.
Una ‘mini acción' de gobierno es autodenominarse conseller de Deports. ¿El Consell usará esta modalidad lingüíistica en sus textos oficiales?
-La conselleria és de Esports.
No lo escribe así el conseller.
-En sus redes sociales.
Es conseller todo el día.
-Con esta cuestión haremos lo mismo que en otros casos. Aplicaremos criterios técnicos. Joan Pons tendrá que sentarse con el departamento de Política Lingüística y ver qué margen tiene para aplicar sus ideas. Queremos fomentar, y así lo establece el Estatut, la modalidad menorquina. Hay que ver cómo se hace.
¿Sin discutir a la unidad de la lengua catalana?
-No la discutimos.
El IME ha apostado por la edición de libros en lengua catalana. ¿Esto cambiará? ¿Editará en lengua castellana?
-El IME debe ser un referente desde el punto de vista científico. No podemos prohibir nada. Editaremos los mejores libros. Debe primar la calidad del contenido.
Con todo, la preocupación por la línea de Joan Pons existe. ¿Puede tranquilizar al sector cultural? ¿Qué cambios habrá en sus políticas culturales?
-El sector cultural puede estar tranquilo. No se limitará nada, se fomentará la variedad menoquina, pero no tiene que ser en perjuicio de nadie ni de otras lenguas.