Unas 150 personas asistieron este martes al emotivo minuto de silencio que el Ayuntamiento de Maó convocó en solidaridad con las víctimas del terremoto de Marruecos, que el pasado 8 de septiembre asoló el centro del país. El acto también sirvió para expresar el apoyo hacia las víctimas de otro desastre natural, el ciclón Daniel, que esta semana ha dejado miles de muertos y desaparecidos en Libia.
El minuto de silencio de Maó fue el más concurrido de todos los que se convocaron este martes en Menorca y, junto al de Alaior, contó con una amplia presencia de integrantes de la comunidad marroquí de la Isla, que asciende a unas 1.700 personas. También se convocaron minutos de silencio desde el Consell y los ayuntamientos de Ciutadella, Es Castell, Sant Lluís y Es Migjorn.
Ayuda
El terremoto que azotó Marruecos la noche del pasado viernes alcanzó una magnitud de 6,8 en la escala Richter, una intensidad inusual que ha dejado miles de muertos y una gran devastación. El secretario de la Asociación Shabab Menorca, Youness Etmaiti, señalaba este martes que «la tragedia ha traído mucha tristeza a todos los marroquíes de la Isla» y se mostraba muy agradecido y emocionado «por la solidaridad y el apoyo recibido desde el Ayuntamiento de Maó y de todo el pueblo de Menorca».
Pasados unos días del desastre, ahora desde la asociación ya trabajan para mediar entre las personas marroquíes residentes en la Isla y las familias afectadas, para que la ayuda pueda llegar «más directamente que si se canaliza a través de las ONG». «En Menorca, casi el 90 por ciento somos del norte de Marruecos, pero la gente tiene familiares, amigos y conocidos en todo el país», aclara Etmaiti.
En cuanto a las principales necesidades sobre el terreno, desde Shabab Menorca señalan que la solidaridad dentro de Marruecos está funcionando muy bien, y los afectados están recibiendo comida gracias a la generosidad de sus compatriotas, y consideran que en este momento es prioritario recaudar fondos para ayudar en la reconstrucción. «Lo más importante ahora es la asistencia psicológica a las miles de personas afectadas, muchas de las cuales se han quedado sin casa, así como la reconstrucción de las amplias zonas que han quedado destruidas por el seísmo», enfatiza Etmaiti, quien añade que «la gente necesita ayuda psicológica y nosotros creemos en el sistema de salud público de Marruecos, pero al haber tantos afectados será difícil que se pueda atender a todo el mundo».
Después del minuto de silencio de este martes, los representantes de las asociaciones Shabab Menorca y Al Kahir se reunieron con el alcalde de Maó, Héctor Pons, con la concejala de Cooperación, Beatriz Gallardo, y con los portavoces de la oposición, Mateu Ainsa y Jordi Tutzó, para establecer las necesidades de ayuda principales y trasladarlas al Fons Menorquí de Cooperació, la entidad que deberá canalizar la ayuda.