El precio del combustible lleva semanas bajando y el efecto ya se nota en los bolsillos de los conductores que van a repostar en las gasolineras de Menorca. Los carburantes dan una tregua tras el pico de septiembre y actualmente el litro de gasolina se sitúa, de media, en los 1,718 euros, mientras que el de diésel ronda los 1,716 euros. Aunque aún son cifras superiores a las registradas en mayo, el mes en el que más barato salía llenar el depósito, con el litro de gasolina a 1,676 euros y el de diésel a 1,511 euros, son inferiores a las anotadas en los últimos meses y todo parece indicar que los precios se están empezando a estabilizar.
La escalada se hizo evidente en verano, cuando en algunas gasolineras de Menorca se rozaron los dos euros el litro que se superaron en la misma época del año pasado. Los 1,676 euros el litro que se pedían en mayo en el caso de la gasolina se convirtieron en 1,691 euros el litro en junio, 1,719 euros el litro en julio y 1,829 euros el litro en agosto. Cuando parecía que no podía costar más llenar el depósito del vehículo, llegó septiembre y con él un nuevo encarecimiento que situó el litro de gasolina en los 1,864 euros. Cuatro meses consecutivos de aumento de precios que parecen haber llegado a su fin.
La bajada se inició en octubre
Desde que empezó octubre, los precios han bajado. Entonces el panel informativo de las gasolineras en Maó, por ejemplo, advertía un coste medio de 1,799 euros el litro de gasolina y de 1,793 euros el litro de diésel. En lo que llevamos de noviembre ha indicado una media de 1,749 euros el litro de gasolina y de 1,75 euros el litro de diésel, unos precios inferiores a los alcanzados en el mismo periodo del año anterior: 1,835 euros el litro de gasolina y 2,032 el litro de diésel.
Aunque la comparativa con 2022 resulta positiva, hay que tener en cuenta que ese ejercicio se superaron los dos euros el litro en junio, julio y noviembre. Un año antes, en 2021, los precios rondaban los 1,557 euros el litro de gasolina en octubre y los 1,436 euros el litro de diésel. En noviembre de ese mismo año ascendieron a 1,579 euros el litro de gasolina y a 1,457 euros el litro de diésel.
Lo que sería competencia desleal.