La modificación del proyecto de reforma del hospital Verge del Toro, después de que el año pasado se detectaran deficiencias que requieren consolidar el edificio, está en elaboración y el Servicio de Salud estima que el coste total de la obra se acercará a los 20 millones de euros. Esta cantidad supone casi la mitad del presupuesto destinado a Menorca dentro del Plan de Infraestructuras sanitarias del Govern balear para los años 2024-2027, que se ha fijado en 43,5 millones.
El director general del IB-Salut, Javier Ureña, presentó ayer las inversiones previstas dentro del plan durante su comparecencia, a petición de Més per Mallorca, en la Comisión de Salud del Parlament balear.
La reconversión de la antigua Residencia en un centro sociosanitario y de atención a la cronicidad, para pacientes de larga duración, es el segundo proyecto de mayor envergadura en esta área sociosanitaria, pero se ha encontrado con escollos en las obras, modificaciones de contrato, que lo han encarecido. La I fase de la obra fue la limpieza de la fachada y reforma de la cubierta del edificio por 2,7 millones, sin que se realizara entonces un análisis estructural que ha llevado al proyecto a la situación actual de desviación presupuestaria. De los 14,5 millones iniciales de esta II fase (con impuestos incluidos) a los 19 o 20 millones que se estiman ahora, el incremento supera el 38 por ciento.
Al menos seis meses de retraso
Durante su intervención en la Cámara, Ureña argumentó sobre la desviación del presupuesto en el ‘Verge del Toro' que «acometer una obra en un edificio antiguo es arriesgado y prácticamente hay que prever que puede haber algún retraso», y el sociosanitario de Maó desde luego no cumplirá los plazos iniciales. Según el director general del IB-Salut, «si bien en principio estaba previsto que las obras finalizaran en el primer trimestre de 2025, en estos momentos ya estamos acumulando un retraso mínimo de seis meses», para «poder acometer esas necesidades estructurales que se han detectado, hacer esa modificación del proyecto y también el modificado del contrato de obras, que también se ve afectado», informó a los diputados.
Ureña explicó que el futuro hospital, que afecta a una superficie de 5.100 metros cuadrados, contará con 60 habitaciones, en las que se albergarán entre 60 y 90 camas; tendrá un área de hospitalización, una ambulatoria y otra de apoyo clínico, y además contará con un espacio para pruebas radiológicas, farmacia y laboratorio de extracciones. Las obras siguen en ejecución, seis años después de que arrancara todo el proceso para recuperar este edificio, con una I fase de fachadas y cubiertas que costó 2,7 millones de euros, y esta II, que se había adjudicado inicialmente por 14,5 millones (impuestos incluidos) y que ahora subirá hasta casi veinte.
Son Dureta se lleva 161 millones
El Plan de Infraestructuras de Salud da continuidad a muchos de los proyectos iniciados por el anterior Ejecutivo autonómico, son grandes obras comenzadas como el complejo sociosanitario de Son Dureta, en el que se prevé una inversión de 160,7 millones de euros, o el ya mencionado del ‘Verge del Toro' en Maó.
El plan contempla una inversión total de 434,8 millones de euros entre 2024 y 2027 que, por áreas de salud, queda distribuida de la siguiente manera: 352,4 millones para el área de Mallorca; 43,5 millones para Menorca; y 38,9 millones en el área de Eivissa y Formentera. Contempla actuaciones en todos los niveles asistenciales, el sociosanitario, el hospitalario –con el plan director del Hospital de Manacor como proyecto de mayor envergadura, con 51,2 millones de euros–, y la atención primaria, con una inversión de 169,5 millones en las tres áreas hasta el 2027.
Si hubieran tirado el edificio hubiera salido mucho más económico pero nooooo, hay que enriquecer al prójimo, las puertas giratorias van a tope.