Las dificultades para adquirir una vivienda en Menorca se ve claramente comparando dos simples datos: los sueldos y los precios de las casas. Y sobre todo relacionando el aumento que ha experimentado uno y otro en los últimos años. El precio de las casas en Menorca desde 2018 se ha incrementado entre un 60,4 en Maó y un 68 por ciento en Ciutadella. En cambio, los salarios durante este periodo han aumentado un 12,4 por ciento, es decir, cinco veces menos que el coste de la vivienda.
Es cierto que en el último año la disparidad se ha reducido, gracias a que los salarios medios en Balears han experimentado un mayor aumento, pero aun así los precios de la vivienda siguen aumentando mucho más (+8,4 por ciento en Maó y +12,7 por ciento en Ciutadella) que los sueldos medios (+6,1 por ciento). Si a eso le añadimos el incremento de los tipos de interés experimentado en el último año, que ha afectado, por un lado, a las hipotecas variables y por el otro a los nuevos préstamos, el cóctel está servido.
Con estos datos en la mano, y con un sueldo medio neto de unos 26.000 euros anuales en 2023, un trabajador en Ciutadella debe dedicar el salario íntegro de 12,3 años para pagar un piso medio de 90 metros, que según los datos oficiales difundidos por el Ministerio de Vivienda referidos al primer trimestre de 2024, rondaría los 236.500 euros. En 2018 le bastaba con 8,2 años. En Maó pasa lo mismo, pero al tener los precios menos disparados, la media se reduce en la actualidad a 9,3 años de sueldo íntegro, por los 6,5 de hace seis años.
Cerca de la burbuja
Y es que la escalada de los precios en la vivienda en Menorca parece que no tiene fin y se empieza a acercar a las desorbitadas cifras de 2007, antes de estallar la burbuja inmobiliaria. El metro cuadrado al acabar marzo se situaba en los 2.848,8 euros en Ciutadella y los 2.148 euros en Maó.
En el caso de Ciutadella se trata de la cifra más alta de toda la serie histórica en un primer trimestre, por encima incluso de los años del boom del ladrillo. No obstante, aún no se ha superado el récord histórico del segundo trimestre de 2007, cuando se tocó techo en Ciutadella con 3.583,3 euros el metro cuadrado. En Maó, los precios están por debajo de los años de la burbuja, aunque siguen escalando.