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Once inspectores, fotos aéreas y rastreos ‘on line’: el plan del Consell contra el alquiler ilegal

El proyecto que aspira a dos millones de fondos de la ecotasa también preve contratar otros cuatro administrativos para agilizar la tramitación de los expedientes

Manifestantes contra la gentrificación del casco antiguo de Ciutadella por el alquiler turístico, en la protesta del pasado agosto. | Archivo

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El Consell contará con un equipo específico de profesionales, inspectores y administrativos, para detectar y sancionar el alquiler turístico ilegal si prospera el proyecto piloto presentado para recibir financiación del Impuesto Turístico Sostenible (ITS). Con un presupuesto de 1.879.685 euros y una duración de dos años, la iniciativa prevé contratar otros cuatro técnicos para reforzar la inspección –con los que habría un total de once–, pero además dotarse de tres administrativos y un auxiliar administrativo para agilizar los expedientes.

El departamento de Ordenación Territorial y Turística, que dirige Núria Torrent, ha acometido hasta ahora diferentes actuaciones para luchar contra el alquiler turístico ilegal, que incluyen la contratación de servicios con la firma Talk&Code para el uso de una plataforma de seguimiento, control y gestión de las ofertas de alquiler vacacional; la colaboración con Booking.com para aumentar la transparencia de la empresa digital de alojamiento; el protocolo con las policías locales para la detección de los alquileres sin licencia; y la coordinación con la Agencia Tributaria de las Illes Balears para cruzar datos que ayuden a frenar la comercialización ilegal de estancias turísticas en viviendas.

El proyecto presentado a la ecotasa es una nueva vuelta de tuerca en la lucha contra el alquiler turístico ilegal. «Se trata de una prioridad, tanto de nuestro departamento como de todo el gobierno del Consell, porque repercute en la calidad de vida de la gente, es gravísimo que no se pueda encontrar una vivienda para todo el año», declaró ayer la consellera Núria Torrent.

Además, subrayó, este tipo de práctica ilegal «afecta a la calidad del turismo porque escapa al control de unos estándares». Por este motivo y bajo ese paraguas del objetivo de calidad de la oferta, en esta convocatoria bianual para recibir fondos de la recaudación del ITS se ha abierto la posibilidad de plantear proyectos para frenar el alquiler turístico ilegal. Las acciones realizadas hasta el momento han dado buen resultado. «La sinergia está funcionando bien, tenemos mucha información, estamos sobrepasados de trabajo, ahora lo que nos faltan son manos», afirmó la consellera.

Visor IDE

El proyecto piloto no solo reforzaría los medios humanos sino también los técnicos. Contempla sacar a concurso por 140.000 euros (más IVA) la contratación de servicios tecnológicos para detectar la publicidad de alquiler ilegal en internet, «una plataforma con más prestaciones y más ambiciosa que Talk&Code, que nos ayude a gestionar la información y así no duplicar esfuerzos, haciendo más efectivo el trabajo de inspección», explica Torrent.

Por otro lado, está la adquisición de cinco vehículos híbridos para realizar desplazamientos y comprobaciones sobre el terreno, además de material informático para los profesionales. Por último, el proyecto piloto incluye la compra de herramientas informáticas para la captura de imágenes aéreas y su tratamiento (fotogrametrías de alta resolución) con el fin de mejorar el visor general Infraestructura de Dades Espacials IDE Menorca, el portal de cartografía e información geográfica del Consell en el que también se puede ver la ubicación de las licencias de alquiler turístico.

El apunte

Campaña para concienciar a los propietarios y que eviten esta práctica

Otra línea de actuación del proyecto para luchar contra el alquiler turístico ilegal es la puesta en marcha de una campaña de concienciación dirigida a los arrendadores en potencia. Un intento, complicado, de que los dueños de viviendas no vean únicamente el negocio y no practiquen el alquiler ilegal de pisos o casas a turistas. «Queremos un cambio de chip, que se den cuenta de las consecuencias negativas que eso tiene para Menorca», apunta la consellera Núria Torrent, no solo por «el problema de la vivienda» que está generando, sino también porque «es uno de los factores que está detrás de la masificación», añade.

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