La nueva variante que conecta la carretera general, entre Maó y Alaior, con la urbanización de L’Argentina está siendo utilizada por algunos conductores temerarios como vía de aceleración para adelantar a los turismos y camiones que circulan por la principal vía de la Isla, especialmente cuando este tramo se halla congestionado.
Según denuncian ciudadanos de Alaior que han presenciado estas actuaciones en reiteradas ocasiones, los conductores hacen servir la rotonda para avanzar por debajo de la ‘general’ en los dos sentidos. Lo hacen a toda velocidad y vuelven a salir a la calzada principal utilizando el carril de acceso también a una velocidad elevada. Ejecutan la maniobra, además, sin ceder el paso apropiándose de una preferencia que no les corresponde, lo que incide en la preocupación de los vecinos que ya lo han puesto en conocimiento de la Policía Local.
Los mismos denunciantes indican que, tanto en la parte alta de la vía como en la baja, estas maniobras ponen en riesgo a los usuarios regulares por la velocidad con la que las realizan. Del mismo modo indican que esta peligrosa práctica puede tener consecuencias muy graves si provocan un accidente con los residentes en la urbanización de L’Argentina o del Lloc de Menorca cuando salen del núcleo rural para incorporarse a la carretera general en cualquiera de las dos direcciones.
Estas acciones temerarias son motivo de comentarios y de preocupación entre residentes, usuarios habituales de la variante para acceder y salir de él por lo que piden una solución. «Lo hacen de día y de noche», apunta un vecino, «a mi me han adelantado por debajo a más de 90 por hora, es un peligro», añade. En la misma vía, asegura, hay marcas de frenazos que han tenido que dar en alguna ocasión para evitar la colisión. Otro indica que al haberse ejecutado el proyecto redimensionado a la baja «no hay tanta curva en la variante, lo que facilita que pasen por debajo y aumenten la veolcidad».
La solución pasaría por mejorar la señalización pero los residentes no se muestran partidarios de que se coloquen bandas rugosas que obligan a reducir la velocidad a los vehículos.
La Guardia Civil de Tráfico ya está al corriente de la ejecución de esta práctica, que también la realizan algunos conductores en la rotonda de entrada a Alaior y en la de Ferreries, de ahí que disponga puntos de alta visibilidad con presencia estática de agentes a modo de vigilancias preventivas en otras variantes de la carretera general.
En todo caso, la infracción que se comete está en el exceso de velocidad que ejecutan estos conductores al pasar por debajo de la carretera y no en la decisión de salir y volver a entrar en ella para adelantar y ganar tiempo, lo que no supone una violación de las normas de tráfico.
cadena de badenes y asunto resuelto