La auditoría informática realizada para aclarar qué ocurrió con el informe de Hidrobal en el que se advertía sobre el exceso de nitratos en el agua que salía de la desnitrificadora de Malbúger (Maó), y que el equipo de gobierno del PSOE tardó un mes en abrir, confirma la versión ofrecida por el alcalde Héctor Pons desde un principio: que el informe fue enviado mediante un trámite por el personal administrativo de la casa a la concejala de Urbanismo y Ciudad, Dolores Antonio, pero que esta no lo vio hasta un mes después. Tampoco se activó ningún sistema de notificación o aviso a los responsables.
Por ello, en el informe de la auditoría, que ha llevado a cabo una empresa externa, se concluye que fallaron los mecanismos internos de gestión y control, por lo que se proponen mejoras en el manejo de los documentos, como la activación del sistema de alertas de que dispone la herramienta, y que en estos momentos no se usa. También se sugiere mejorar la formación del personal.
Sin movimientos extraños
El informe fue presentado ayer a los grupos de la oposición, en una nueva sesión de la comisión especial creada por el Ayuntamiento para abordar la crisis del agua en el municipio. Desde Ara Maó se había pedido una auditoría exhaustiva para saber cuándo se había abierto exactamente el informe de Hidrobal y quién lo había visto. Todo ello con el objetivo de poner en marcha nuevos protocolos de actuación para impedir que se vuelva a dar una situación similar.
La auditoría pone de manifiesto que desde que llegó el informe de Hidrobal en el que se anunciaba la necesidad de parar la desnitrificadora, firmado el 21 de agosto del año pasado, solo accedió al expediente el personal administrativo del Ayuntamiento. Ni la concejala Dolores Antonio ni el alcalde Héctor Pons figuran en el registro de accesos. También se constata que el programa de gestión de los expedientes que usa el Consistorio no generó ninguna alarma ni envió ningún correo electrónico.
Igualmente, la auditoría asegura que no se han detectado evidencias de borrado o manipulación de los registros, ni alteraciones sospechosas durante las fechas investigadas. Tampoco se han evidenciado intentos de ocultación o eliminación de la información, ni se observan accesos extraños.
Mientras tanto, el Ayuntamiento ha firmado el contrato para la reparación de la desnitrificadora de Malbúger con Vitaqua, y ayer un técnico de la empresa realizó la primera visita a la planta, acompañado del personal municipal y de Hidrobal.
Hèctor dimissió!!