Sanidad ha ordenado el cierre de la sala de despiece del matadero de Maó al detectar deficiencias en la gestión sanitaria. Los inspectores han levantado un acta decretando la suspensión temporal de la actividad, que no se podrá retomar hasta que no se certifique que los problemas se han subsanado. Según fuentes de la conselleria, se ha dado un plazo de diez días a la cooperativa Monte Toro, que desde 2014 gestiona el sacrificio en Maó, para que justifique documentalmente que ha resuelto las deficiencias, lo que ha logrado solo en parte.
El presidente de la cooperativa, Biel Seguí, confía en solventar cuanto antes esta incidencia, que atribuye a la creciente exigencia de la normativa europea en vigor, y dice estar animado por la creciente demanda de llocs, particulares y agroturismos que concita.
No obstante, la propia memoria del proyecto de mejora del matadero que ahora impulsa el Ayuntamiento ya advierte que tener «buena parte de las instalaciones viejas y obsoletas puede repercutir sobre la salud pública, el bienestar animal y la eficiencia operativa».
Ciutadella
El cierre de la sala de despiece, del que no se ha dado cuenta al Ayuntamiento, vuelve a concentrar temporalmente todo el sacrificio en Ciutadella. Llega en un momento especialmente delicado para la cooperativa, que en otoño estuvo a punto de cesar su actividad. Acuciada por las deudas, se vio obligada a ajustar el personal y a funcionar como un obrador compartido, en el que los propios socios y ganaderos de la zona de Llevant llevan a procesar sus animales, comercializando los productos cárnicos resultantes según la normativa de seguridad alimentaria y salud pública.
Frente a esta situación, el Ayuntamiento no descarta recuperar la gestión, externalizada en principio hasta 2039, aunque la concejal Susana Salom asegura que no es la primera opción que se contempla. «Intentamos respetar el contrato con la cooperativa y contar con ellos, con independencia de que finalmente decidan dejar el servicio», asegura.
El Consistorio maonès ya le ha transferido una partida de 250.000 euros para gastos corrientes con el objeto de que pueda saldar parte de la deuda que arrastra. Los 600.000 euros restantes aportados por el Consell se destinan íntegramente a poner a punto las instalaciones.
El proyecto de mejoras, que incluye renovar la depuradora y construir una pequeña planta de biogás, está presupuestado en 580.952 euros y tiene un plazo de ejecución de cinco meses. Salom anuncia que mañana se decidirá la adjudicación de las obras para que estén listas en septiembre.
Se pretende salvaguardar el matadero para el sacrificio de ganado bovino, ovino y de cerdos, pero la producción es «muy baja». En 2023 solo se sacrificaron 1.034 cabras y ovejas, 720 bovinos y 1.750 cerdos.
Si se dieran una vuelta por el polígono de San Luis tanto sanidad como inspectores cerrarían algún negocio más.