Dos de cada tres bloques de pisos nuevos en Menorca se construyen en Es Castell, Sant Lluís y Maó

Dos de cada tres proyectos de construcción de nuevos bloques de pisos se ubican en la zona del levante insular, entre Es Castell (40), Sant Lluís (38) y Maó (33), según los datos del Col·legi d'Arquitectes de Balerars (Coaib). En Ciutadella se han visado 30 proyectos de vivienda plurifamiliar.

En Ferreries han sido 15, en Alaior ocho y en Migjorn figura uno. Es Mercadal es el único municipio en el que no se ha registrado actividad.

En cambio, si atendemos a los proyectos de viviendas unifamiliares, los chalés, el orden del listado cambia, tomando la delantera los municipios con una mayor preponderancia de las urbanizaciones. Ciutadella lidera el ranking con 41. Le siguen Sant Lluís y Es Mercadal, con 29 y 28 respectivamente. En Maó se han visado 24, en Es Castell 15, en Ferreries cinco y en Es Migjorn dos.

Más viviendas, pero de alto standing

Y es que la construcción de nuevas viviendas se ha reactivado, pero enfocadas al mercado de alto standing y a un ritmo insuficiente para paliar la grave crisis habitacional. En el último año –de junio de 2024 a junio de 2025– el Col·legi d’Arquitectes de Balears (Coaib) ha visado 323 proyectos para construir nuevas casas, prácticamente el doble que en el mismo periodo del año anterior, aunque casi la mitad son chalés y de los 165 nuevos pisos la gran mayoría se distribuyen en promociones en el levante insular que están fuera del alcance del común de la población residente.

Los datos de proyectos visados del último año, presentados ayer en la delegación menorquina del colegio oficial, señalan a las viviendas como la actividad más dinámica en el sector de la construcción. Entre reformas, nuevas casas y, en menor medida, legalizaciones suman 529 proyectos, más del 80 por ciento de los 650 que han recibido el visto bueno de los arquitectos. Esta última cifra supone un incremento del 8,7 por ciento en relación al año pasado. El repunte más llamativo es el de los pisos, del 150 por ciento, pero una comparación con 2007, cuando se visaron más de 1.600, da una mejor perspectiva de la dimensión del fenómeno.

Desde el colegio de arquitectos reconocen que el ritmo de construcción de nuevas casas no permite paliar la crisis de acceso a la vivienda. «Hay que potenciar las viviendas de precio limitado y de protección oficial porque no se trata solo del número que se construye, sino también del precio», explica Caterina Allés, secretaria de la demarcación menorquina, que presentó el balance junto a la tesorera, Aina Coll.

El visado de nuevos proyectos de vivienda pública brilla por su ausencia. En este punto hay que tener en cuenta que el Institut Balear de l’Habitatge (Ibavi) no visa sus proyectos en el colegio oficial de arquitectos, aunque de las cinco nuevas promociones en los que trabaja el Ibavi solo cuenta con proyecto redactado la de 14 viviendas en Alaior. El resto de proyectos anunciados, que sumarían 79 pisos, todavía no se han redactado, por lo que tampoco podrían incorporarse al listado de obras visadas.