El Ayuntamiento de Ciutadella decretó este jueves el cierre preventivo de la plaza Joan de Borbó (Empordà) para facilitar las acciones de endoterapia y evitar que la creciente presencia de orugas por la plaga de la procesionaria pueda afectar tanto a los niños como a las mascotas que acostumbran a frecuentar este espacio.
De hecho, el precinto perimetral puesto por agentes de la Policía Local prohíbe el paso de personas y el acceso a las instalaciones del parque infantil.
Fuentes municipales confirmaron ayer la actuación que se lleva a cabo, que se repite anualmente a estas mismas alturas del año porque la procesionaria aflora de todas formas aunque se le aplique tratamiento.
La administración municipal pide prudencia y colaboración a los ciudadanos, a quienes requiere que respeten las advertencias para no acceder a las zonas infectadas por las orugas.
... siempre lo he dicho, las procesiones deben contenerse en espacios cerrados con barreras si es preciso, para que no escapen de sus reductos infestados y no molesten al resto de los viandantes...