Un avión de la compañía alemana Germanwings que realizaba el trayecto entre Barcelona y Düsseldorf se ha estrellado este martes en los Alpes franceses, según informa la emisora gala Europe 1. Transportaba a 144 pasajeros, entre ellos dos bebés, dos pilotos y cuatro tripulantes de cabina. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha informado de que entre los pasajeros se encuentran 45 personas con apellidos españoles.
Según han informado fuentes de Aena, el avión ha despegado de la terminal T-2 del aeropuerto de Barcelona poco antes de las diez de la mañana. El aparato, un Airbus A320, ha desaparecido de los radares en la región de Alpes de Alta Provenza y se ha estrellado cerca de la localidad de Barcelonnette, a 100 kilómetros de Niza, según las informaciones recabadas por este medio. El piloto realizó una llamada de emergencia a las 10:46h pudiendo haber detectado algún tipo de avería.
El avión siniestrado es el del vuelo 4U9525, con hora de salida a las 8:35h según la web Flightradar24. Transportaba a 144 pasajeros, dos pilotos y cuatro tripulantes de cabina. El primer ministro francés, Manuel Valls, ha confirmado la información y ha añadido que se teme que hayan muerto los pasajeros y la tripulación.
Por su parte, el presidente de Francia, François Hollande, ha anunciado que «las condiciones del accidente hacen pensar que no hay ningún superviviente». En su perfil de Twitter, Hollande ha escrito: «Quiero expresar toda mi solidaridad a las familias de las víctimas de este accidente aéreo».
El avión siniestrado tiene 24 años de antigüedad y pertenece a la compañía Germanwings, filial de Lufthansa desde 1991, según datos de Airfleets.net
Aena ha habilitado una sala en el aeropuerto de Barcelona para atender a los familiares de las víctimas.
Escalofriante la primera reacción a esta noticia, horror, dolor, como puede un familiar de los fallecidos superar esta tragedia? Intento ponerme en su sitio y lloro por ellos, por los fallecidos, por mis hijos, por lo nos puede pasar en esta vida que no sabemos a dónde nos va llevar.