«Llegaron sobre las once de la noche y pidieron mesa en la terraza. Él, con pelo largo y barba tupida de color negro. Ella, rubia, alta y con tacones. Ambos iban muy bien vestidos y eran españoles. Pidieron todo lo que quisieron de beber y de comer. Y en un descuido se fueron sin pagar. Queremos que se sepa para que no le ocurra a otros establecimientos». Quienes hablan son los nuevos responsables de «Maria Bonita», un local ubicado en el puerto de Maó.
El suceso ocurrió el pasado sábado. Según narran las víctimas, primero la chica acudió al baño para abandonar luego el restaurante. «Parecía que iba al coche o algo», comentaron. Luego, el chico aprovechó que la camarera retiraba los platos para irse detrás.
«Fue muy rápido. Salimos enseguida en las dos direcciones del puerto para buscarlos, pero no los encontramos. Lo tenían todo bien planeado, sabían lo que hacían». Los dueños del restaurante lamentan lo ocurrido: «Es nuestro primer verano, creíamos que estas cosas no pasaban en la Isla. Ahora tendremos una persona siempre en la terraza».
La verdad es que la opinión de crítico gastronómico me parece bastante poco veraz. Vamos habitualmente a este local y la atención es siempre perfecta igual que la comida.