La jueza del Juzgado de Instrucción número 3 de Maó envió a prisión el pasado domingo a un joven de unos 25 años de edad, de nacionalidad brasileña, acusado de haber propinado una paliza a su pareja con la que mantenía una relación tortuosa. La agresión, por la que la mujer precisó asistencia médica y fue traslada en ambulancia a un centro de salud, ocurrió en la madrugada del sábado en una casa del casco antiguo de Alaior.
La titular del juzgado dictó el auto de prisión por la gravedad de las lesiones que presentaba la víctima a la que la Guardia Civil y la Policía Local hallaron con el cuerpo ensangrentado debido a una brecha en la cabeza que le había abierto el hombre con una botella de cristal. La amenazó de muerte y le propinó reiterados golpes en varias partes de su cuerpo. La mujer declaró en la denuncia que su pareja cogió varios objetos punzantes con la intención de clavárselos mientras ella se defendía como podía.
Ya antes de agredirla en la casa, el acusado había mostrado una actitud verbal y física muy agresiva en un bar del pueblo con la mujer, que tuvo su continuidad horas después en el domicilio del centro del pueblo.
El joven, ingresado en prisión, posee antecedentes policiales y ya había sido juzgado por otra agresión a su pareja el pasado mes de febrero en Es Castell. Entonces no fue condenado ya que ella se negó a declarar.
Todo apunta a que el hombre actuó bajo los efectos de las drogas y el alcohol lo que influyó en su estado de nerviosismo y agresividad por el que también tuvo que ser trasladado al Hospital Mateu Orfila donde pasó la noche en observación bajo custodia policial hasta ser dado de alta a la mañana siguiente y conducido a los calabozos de la Guardia Civil. El domingo declaró en el juzgado.
La jueza dictó el auto de prisión que ha recurrido el abogado del acusado para salvaguardar la integridad física de la mujer. Entiende que correría peligro frente a su pareja sentimental cuyo descontrol es evidente cuando está bajo los efectos de las drogas o el alcohol.