Un total de 116 propuestas de sanción elevadas por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, las policías locales de los ocho municipios y los inspectores del Govern durante la Semana Santa constituyen el balance global que arrojan los dispositivos especiales de vigilancia durante este periodo vacacional. Se trata de la aplicación de las normas sanitarias derivadas de la pandemia de la covid-19 que impuso el Govern en los días previos al inicio de estas jornadas festivas, que en todo caso se mantienen vigentes hasta el próximo día 11.
Las policías locales han sido las más activas, con 82 actas levantadas, seguidas por la Policía Nacional, con 21, mientras que las inspecciones del Govern han supuesto otras 13 denuncias.
El uso de las mascarillas, el incumplimiento del número de personas que podían congregarse tanto en espacios públicos como privados, y especialmente, el del toque de queda establecido entre las 10 de la noche y las 6 de la mañana copan la mayor parte de las actas que habían levantado los agentes hasta el pasado lunes.
Las normas prohibían la concentración de más de dos núcleos de convivientes en espacios abiertos y cerrados. En las terrazas está permitido que se reúnan hasta seis personas mientras que en los interiores solo pueden ser cuatro. En los domicilios solo podían estar los convivientes.