La tienda de golosinas de Ciutadella, situada en plena Contramurada de Ciutadella, no solo vendía alcohol sin tener permiso, como ya ha avanzado este diario, sino que en la inspección que hizo el viernes por la tarde la Policía Nacional, juntamente con la Policía Local y Sanidad, se encontraron varios gramos de cocaína.
Algo que no sorprendió a la policía, ya que la inspección se realizó tras varias denuncias en este sentido y tras una investigación policial ante la sospecha de que en el establecimiento se suministraba presuntamente sustancias estupefacientes, concretamente cocaína, algo que la Policía sigue investigando.
La Policía, en un comunicado, asegura que la mujer que regenta el negocio, aprovechaba «la apariencia de un local el cual contaba con todos los permisos para pasar desapercibida», e incluso «encontrándose además sus hijos menores de edad en el interior cuando algún cliente accedía al interior del mismo pero no compraba caramelos ni dulces, sino que presuntamente adquiría sustancia estupefaciente y alcohol».
Durante la inspección, además de constatar la falta de permisos para vender bebidas alcohólicas, se encontraron ocultos debajo del ratón del ordenador y de una figura seis envoltorios de plástico de cocaína con un peso de 2 gramos.
La propietaria fue denunciada por no disponer de la licencia adecuada para bebidas alcohólicas, así como que se procedió al inmediato cierre del local por parte de Sanidad por no adoptar las medidas mínimas de salubridad para la venta de productos alimentarios. Asimismo, se dio cuenta a Fiscalía de Menores para que adopte las medidas necesarias al haber verificado en varias ocasiones como la dueña estaba en compañía de sus hijos menores en el interior del establecimiento.
Ni 24 horas ha durado cerrado