El adolescente británico de 18 años de edad, de origen hindú, detenido la tarde del domingo por la falsa amenaza de bomba en un vuelo de Easyjet entre Reino Unido y Menorca, ha pasado la mañana de este martes a disposición judicial, para declarar ante el titular del juzgado número 2 de Primera Instancia e Instrucción de Maó.
El joven fue arrestado después de que Scotland Yard y la policía francesa detectaran supuesta amenaza de bomba en una red social. Entonces alertaron a las autoridades españolas, que activaron el protocolo de emergencias antiterrorista y desde la base aérea de Zaragoza movilizaron a dos cazas del Ejército del Aire para escoltar la nave hasta Menorca. Una vez en la Isla, la policía judicial de la Guardia Civil, con especialistas en desactivación de explosivos, verificó el equipaje de todos los pasajeros y se procedió a la detención del supuesto autor de la falsa amenaza. Además cinco amigos del detenido, que viajaban con él, también tuvieron que declarar como testigos ante los agentes.
Al adolescente se le acusa de un presunto delito de desórdenes públicos y una de las consecuencias que puede afrontar por esta broma macabra es sufragar el elevado coste de todo el dispositivo de seguridad desplegado.
La madre del adolescente se ha desplazado a Menorca para acompañar a su hijo y la mañana de este martes estaba en las puertas del juzgado de Maó donde lo ha podido saludar antes de pasar a declarar ante el juez, que deberá decidir si lo deja en libertad y le impone algunas medidas cautelares.
Hasta que no pague cuanto se le imponga, que no salga ni de la cárcel ni de la isla, por supuesto. Ya es mayor de edad. Nada de que lo abone la familia. Si no hay, que lo asuma Boris Johson, que este es ciudadano suyo y mientras aguarda, que haga trabajo comunitario.