La acumulación de aguas pluviales en las calles de Cala en Porter provoca, una vez más, la indignación de varios residentes de la urbanización que, tras la tormenta de lluvia y granizo que tuvo lugar el pasado 18 de agosto, han manifestado quejas por los desperfectos que han sufrido sus inmuebles y vehículos.
Las calles en pendiente de esta localidad favorecen, siempre que llueve, la creación de balsas de agua que se forman en frente de las casas y que arrasan con todo. Una propietaria afectada asegura que su coche «ha sufrido una gran avería» al verse involucrado en una inundación mientras estaba aparcado en un tramo del Passeig Marítim.
Esta misma vecina de la urbanización —perteneciente al municipio de Alaior— explica que «hemos avisado al Ayuntamiento y al servicio de limpieza varias veces para que actúen, pero nadie hace nada» para solucionar un problema que se repite cada vez que llueve con intensidad en Cala en Porter.