Hay un problema real con la ciberdelincuencia también en Menorca. Por más que los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado se esfuerzan en reiterar entre la ciudadanía las medidas de prevención para evitar los engaños económicos a través de internet, el delito de moda sigue al alza en la Isla.
La tasa de criminalidad del tercer trimestre del año, según los datos facilitados por el Ministerio del Interior, denuncia un crecimiento del 60 por ciento, de enero a septiembre, en comparación con ese mismo periodo del año anterior. Han sido hasta ahora 587 denuncias de esta tipología frente a las 366 del año pasado, la mayoría de ellas (531) correspondientes a estafas informáticas mientras que el resto se divide entre las diferentes modalidades de engaños en la red.
Como contrapunto a esta evidencia, puede apuntarse que en el primer trimestre del año el aumento había sido del 90 por ciento, en relación a 2022, y transcurridos seis meses más la subida se ha moderado hasta el 60 por ciento.
La progresión de los ciberdelitos empuja la tasa de criminalidad en Menorca hacia arriba hasta el punto que se eleva un 10 por ciento respecto al año pasado en el mismo plazo de tiempo. A destacar las cuatro tentativas de asesinato u homicidio doloso habidas hasta final de septiembre y el robo de vehículos que también ha crecido de forma notable hasta un 56 por ciento. Si en 2022 se sustrajeron 34 coches en nueve meses, este año ya han sido 53.
Otro delito al alza es el relacionado con el tráfico de drogas que se impulsa en un 56 por ciento, de 16 a 25 robos en relación al año anterior.
Como es habitual en todo el Archipiélago, son los delitos por hurto los más numerosos aunque en este periodo el aumento no resulte muy significativo al pasar de 668 a 715 denunciados. Por contra han descendido ligeramente los robos con fuerza en domicilios y otras instalaciones, de 155 a 117.
Ciutadella lidera los hurtos respecto a Maó (355 frente a 2022) lo que explica que sume 1.387 delitos frente a los 1.114 de la ciudad mahonesa en el periodo señalado.
En la comparativa entre islas Menorca se mantiene alejada de la tasa de criminalidad del resto con 45,5 delitos por cada 1.000 habitantes. Aunque haya subido dos puntos en este último trimestre continúa muy por debajo de la media balear que está en 65.5. La de Mallorca es la misma -65,5-, la de Eivissa sube a 79,5 y la de Formentera a 56,1.