Un hombre español, de 49 años de edad, se encuentra en estado crítico como consecuencia de una violenta pelea que protagonizó con otro individuo, también español, durante la madrugada del día de Navidad, en plena Nochebuena.
El hombre se hallaba ingresado este miércoles por la mañana en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Mateu Orfila, en coma inducido, con su vida pendiente de un hilo. De hecho, tras el suceso llegó a especularse con un desenlace fatal inminente debido al fuerte impacto que habría recibido en la cabeza con un objeto contundente, y que le provocó un derrame cerebral.
Al mediodía de este miércoles, el Área de Salud de Menorca informó que se había decidido su traslado al Hospital Universitario de Son Espases a lo largo de la tarde o cuando la compleja evacuación estuviese dispuesta.
Los hechos ocurrieron durante la madrugada del lunes, aunque no han trascendido las causas que originaron la violenta disputa, ni tampoco si hubo más participantes que el principal agresor y la víctima. Tras un forcejeo entre ambos en la calle Vasallo, uno de ellos cayó al suelo tras ser golpeado con una barra en la cabeza, y posteriormente recibió más golpes. El presunto agresor abandonó el lugar mientras el herido quedó tendido hasta que pudo recibir asistencia sanitaria y traslado urgente al hospital, ya en estado crítico.
La Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y horas después fue en busca del presunto agresor, que reside en la calle Santa Escolástica, al parecer en una misma casa okupada también por el agredido, aunque el primero habría manifestado que vive allí porque un conocido le ha prestado la vivienda.
El hombre se atrincheró en esa casa a pesar de los requerimientos de la Policía que vigilaba el inmueble para que saliera. Fue necesaria una orden judicial para que los agentes pudieran derribar parte de la vieja puerta de madera de la vivienda, entraran en ella y procedieran a su detención el martes por la tarde. En la operación también participaron efectivos de la Policía Local.
Vecinos del lugar señalaron a este diario que habían estado viendo ir y venir a la Policía por esa calle desde un par de días antes. Los hechos investigados están bajo secreto sumarial en el Juzgado de Instrucción número 1, de Maó.