Antonia Camps, alcaldesa de Es Migjorn, se muestra firme en torno al resultado de los radares instalados en el municipio a finales de junio, que suponen una media de 22 multas diarias en los últimos seis meses ya que desde el 8 de agosto se han registrado 4.677 sanciones.
Las protestas de vecinos y residentes de temporada no alteran la posición del Consistorio que destaca la pacificación del tráfico en el pueblo y en Sant Tomàs gracias a la ubicación de los cinemómetros, más efectivos que las bandas rugosas, como plantean otras personas, indica Camps.
«Ahora puede haber protestas pero hay un código de circulación que todos debemos cumplir, a mi también me ha multado el radar de Es Mercadal, por ejemplo, y a mis familiares en Es Migjorn», razona la primera edil.
Recuerda que la cuestión de poner estos dispositivos ya comenzó a plantearse durante el mandato de Pere Moll, «y nosotros la tiramos adelante porque nos llegaban quejas de vecinos por la falta de seguridad». Añade que uno de ellos, incluso, le han pedido un radar más frente a Binicudrellet, y concluye por tanto, que «están justificados», aunque otro «nos dijo que era un desastre, pero es por el bien de todos»
En Sant Tomàs ocurre algo similar con vehículos y camiones que circulaban a 60 y 70 kilómetros por hora con el consiguiente peligro para las personas, «y ahora se ha pacificado por los radares, ya que solo pueden ir a 30», indica
La alcaldesa comprende que, con la recepción masiva de las sanciones haya quejas, «tocar el bolsillo duele pero hay que ser conscientes de las normas, hay radares y debemos respetar la velocidad como pasa en otros municipios y en la carretera general».
Cuándo prescriben las multas
La acumulación de multas que ahora notifica la empresa contratada, Grupo CGi, ha sido consecuencia de dos problemas que hubo durante el proceso, «pero doy gracias a este grupo y a Silme por su esfuerzo para solucionarlo». En todo caso, señala, «la administración tiene seis meses para comunicar una infracción». La ley indica que si esta es leve prescribe a los tres meses si no ha sido notificada, y a los seis si es grave o muy grave, «es así, y si el ciudadano cree que debe recurrir porque le ha llegado fuera de plazo, que lo haga».
Los recursos se dirigen al Ayuntamiento y este los redirecciona a la empresa que los notifica. Lo importante, suscribe Antonia Camps, es que «a partir de ahora, cuando la gente ha recibido estas multas, tome conciencia y se ajuste a la velocidad a la que pueda circular en el municipio».
Nueva cartelería informativa
La empresa concesionaria de los radares de Es Migjorn, Alumbrados Viarios SA , incrementará la señalización de estos dispositivos para mejorar la información a los ciudadanos, informó ayer el Ayuntamiento.
De esta forma, a partir de la decisión tomada hace dos semanas, habrá más carteles que advertirán de la existencia de los radares y señales luminosas en las vías de entrada al pueblo con el mismo fin. Además, se reubicará uno de los cinemómetros a la rotonda de entrada al pueblo desde la carretera de Es Mercadal, en la misma Avinguda de la Mar, donde ya existen otros dos. La velocidad máxima en esta vía son 40 km/h y de 30 en la de Binicudrell donde hay otro dispositivo.
Sra. alcaldesa, es cierto que tocar el bolsillo nos duele, pero si somos más responsables, tu no llenas la hucha, que es lo que quieres.