La joven turista británica, alojada en un hotel del Arenal d’en Castell, que ha denunciado haber sido violada por tres hombres en la madrugada del pasado sábado en la misma urbanización, explicó que sufrió las tres agresiones sexuales en la calle, entre matorrales, y posteriormente en el coche en el que la recogieron dos trabajadores de la misma urbanización.
La mujer, de 19 años, que pasaba una semana de vacaciones en la Isla junto a su madre y su hija de muy corta edad, había estado tomando copas primero en el mismo hotel y posteriormente en un local de las proximidades, junto a otro turista alojado en el mismo establecimiento. Se trata de un joven que reside en Londres, nacido en Rumanía.
Según la joven, cuando salieron del local él habría aprovechado el estado de confusión en el que se encontraba por el excesivo consumo de alcohol para agredirla sexualmente entre unos matorrales de camino al hotel.
Posteriormente, como pudo, ella inició la marcha hacia su hospedaje, cuando otros dos hombres, un británico y un español, trabajadores de la urbanización, la vieron y la recogieron en el coche que conducía uno de ellos. Fue en su interior donde la habrían violado. Estos dos hombres no tenían ninguna relación con el turista rumano.
Evacuada al 'Mateu Orfila'
Sobre las cuatro de la madrugada la mujer llegaba a su hotel en ropa interior y descalza, además de en un preocupante estado de embriaguez que no le impidió comunicar a una empleada del hotel lo que le había sucedido.
La turista fue evacuada al Hospital Mateu Orfila donde quedó ingresada hasta el anochecer del mismo sábado. Allí fue sometida, además, a la exploración de la médico forense cuyo resultado sería compatible con el de las agresiones sexuales que ella asegura haber recibido.
Posteriormente, ya con la cabeza despejada, prestó declaración ante los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil que horas después, tras este testimonio, procedieron a la rápida detención del turista rumano.
Testigos que los vieron aquella noche confirmaron que habían salido juntos del pub. El hombre quedó en libertad con cargos tras declarar ante la juez de Ciutadella, y la obligatoriedad de estar permanentemente localizado en su lugar de residencia. Las diligencias en curso deberán completarse con el cotejo de las muestras de ADN del presunto agresor y la víctima.
En cuanto a los dos investigados serán citados a declarar en el juzgado de guardia en los próximos días. A ellos no se les ha detenido, en principio, porque no existen las mismas evidencias que en el caso del turista rumano.