No hubo sorpresas en el juicio penal a la bailarina de danza oriental por los delitos de estafa y falsedad documental al Consell de Menorca y al Institut d’Estudis Baleàrics, dependiente del Govern, celebrado ayer en la sección primera de la Audiencia Provincial .
La mujer cumplió con el acuerdo alcanzado con la fiscalía y las acusaciones particulares el pasado septiembre en la vista previa, y este martes ya ingresó en el Juzgado la suma completa de 49.760 euros que le reclamaba el fiscal. Esta cantidad supone para el Consell recuperar la mitad del importe de las 14 subvenciones que concedió a la bailarina, Vanessa Jiménez Sánchez, de 46 años de edad, entre 2016 y 2020, para organizar diferentes eventos, entre ellos tres festivales de danza oriental que no fueron debidamente acreditados. En ese periodo de tiempo obtuvo 95.996 euros de las arcas de la institución insular por los dudosos eventos, que ya causaron recelos entre otras asociaciones de la Isla, con los que solicitaba las ayudas simulando costes de 328.880 euros.
La sentencia adoptada por conformidad entre las partes incluye la indemnización de 22.858 euros al Institut d’Estudis Baleàrics también por estafa y falsedad documental, un año de prisión y una multa simbólica de tres meses a razón de 5 euros diarios, en virtud del acuerdo al que llegaron alas partes. En el mismo juicio de ayer, en el que la acusada admitió los delitos y aceptó la condena, el tribunal aprobó la suspensión del ingreso en prisión al ser la pena inferior a los dos años de reclusión y carecer de antecedentes penales.
Antecedente
Se ponía fin de este modo al proceso que fue destapado a raíz de que la anterior directiva del IEB denunciara al saxofonista Ramón Pérez Vila por un caso prácticamente idéntico que dio pie a que se revisaran centenares de facturas de otras asociaciones subvencionadas por el organismo del Govern.
Fue la Fiscalía anticorrupción, a partir de la documentación aportada por el IEB la que formalizó la querella contra la bailarina, presidenta y máxima responsable de la Asociación Cultural Baladí, al detectar facturas falsas.
Vanessa Jiménez ya admitió ante el Juzgado 1 de Palma, que instruyó la causa, en marzo de 2023, que presentó facturas falsas para recibir las subvenciones, lo que sorprendió al anterior equipo de gobierno del Consell, responsable de la concesión de estas subvenciones, que sin embargo no tomó acciones legales contra ella.
Esta bien hacer público éstos sucesos, Pero muy mal, no detallar quien lo hizo posible. Y que pague por ello! Vergüenza como siempre.