La feria Arrels, que durante este fin de semana ha promocionado el producto local y la cocina de Menorca, ha cerrado este domingo por la tarde las puertas de su primera edición con una asistencia de 3.000 personas. Este es el recuento de público que ha facilitado la organización hasta las 18 horas. Por otra parre, se han consumido más de 10.000 tíquets de degustación de productos.
Los treinta productores que han estado presentes a lo largo de estos dos días en el recinto ferial de Maó han mostrado su satisfacción por el desarrollo de la feria, así como en el volumen de ventas, pues algunos ya agotaron sus existencias antes de acabar la feria.
Por su parte, el conseller de Proyección Económica del Consell, Miquel Company, ha declarado que el éxito de Arrels "radica tanto en el hecho de ser modelo de feria de calidad como por ser pionera en Menorca, por lo que sin duda será una apuesta de largo recorrido".
Durante el fin de semana, los asistentes han podido disfrutar de las diversas actividades organizadas, como las sesiones del aula de cocina, degustaciones guiadas y tallares infantiles.