El que sin duda es uno de los momentos más esperados del año por los vecinos de Alaior está cada día más cerca. Y prueba de ello es que poco a poco se van cumpliendo con las tradiciones previas a la celebración de Sant Llorenç, tal y como sucedió en la tarde de ayer con la fiesta en Binixems.
A las 17 horas, una nutrida representación de la qualcada que cabalgará el próximo fin de semana partió desde la iglesia de Santa Eulàlia con destino a la ermita de Binixems, donde los jinetes participaron en el tradicional replec. Un ensayo para el que contaron con el acompañamiento rítmico de la Banda de Música d'Alaior, cuyos integrantes interpretaron sus instrumentos subidos a un carro.
Uno a uno, los caballeros y jinetes deleitaron a los asistentes con sus saltos frente a la cruz de la ermita, un espectáculo que se prolongó durante dos vueltas completas. Una vez concluida esa parte de la fiesta, la comitiva emprendió el camino de regreso hasta el centro de la población, en este caso con un carruaje tradicional que portó la imagen de Sant Llorenç.
Los protocolos de la fiesta continuaron al caer el sol en Sa Plaça, lugar en el que tuvo lugar la convidada a cargo de quien este año desempeñará el papel de caixer batle, Cristóbal Marquès Palliser. Allí invitó a vecinos y a visitantes a participar en unas fiestas que están a la vuelta de la esquina.