Cinco 'bujots' de paja han sido abatidos a tiros este domingo al mediodía en Ciutadella. Como es la tradición del Domingo de Pascua, ninguno de ellos se ha salvado y han terminado quemados, ya que de esta forma se ha simbolizado que la quema de los hechos negativos del último año. Y uno de los principales acontecimientos de los últimos meses fue el apagón, que dejó a oscuras media Isla durante 56 horas. Por ello, tres de los cinco 'bujots' han sido dedicados a criticar este hecho y el aislamiento energético que vive la Isla.
Así, los que han colgado el bar S'Oficina, el Casino 17 de Gener y el Club Nàutic han coincidido en tema.
Por su parte, en el de Calós el centro de las críticas han sido las compañías de avión que, a pesar de la subida del descuento de residente, también han aumentado el precio de los billetes. «Volem, viajtar, volem pagar, però mos han fotut ses sabates», decía el letrero.
Por último, en el Centre de la Gent Gran de Sa Nostra, el protagonista ha sido un ladrón, «que no volverá».