Los docentes del colegio Mare de Déu del Toro de Es Mercadal descubrieron que tenían «una tipología de alumno al que le costaba aprender a nadar». Se dieron cuenta, relata la directora del centro, Silvana Coll, al organizar excursiones a la playa. Fue entonces cuando pensaron que con la entrada en funcionamiento de la nueva piscina municipal, se podría aprovechar para abordar esa asignatura pendiente.
Fue por ese motivo que pidieron la colaboración del Ayuntamiento y de Biosport, la empresa que gestiona la instalación deportiva, y así nació el proyecto bautizado como «Anem a la piscina». Iniciativa de la que se podrán beneficiar los alumnos de Educación Primaria (de 6 a 12 años) durante siete semanas, hasta el próximo 18 de noviembre.
Una actividad que el colegio ha decidido integrar como parte de la asignatura de educación física, pero que más allá de lo deportivo pretende ser también un elemento integrador. «No queremos que nadie se pueda quedar descolgado por el hecho de no saber nadar», resume la directora del centro.
Y es que tal y como recuerdan sus promotores, «Anem a la piscina» pivota sobre la idea central de ofrecer a los jóvenes la oportunidad de aprender a nadar sea la que sea su realidad cultural, económica, física o mental. Un planteamiento en el que también hace hincapié desde el Consistorio el regidor de Deportes, Javier Periáñez. Este recuerda que la piscina «no es solo una obra deportiva, sino también social».
La directora de dicha instalación, Núria Femenias, relata cómo la experiencia hasta la fecha les ha demostrado que hay niños de 7 y 8 años que no saben nadar. Algo que podría estar directamente relacionado con la falta de medios en el municipio, que hasta el pasado junio carecía de una piscina cubierta. La responsable de esta asegura que con las siete semanas que dura el proyecto los niños saldrán nadando y los que ya sabían, con el estilo perfeccionado.
A juicio de Femenias, lo ideal es que se aprenda a nadar mucho antes, sobre todo para la tranquilidad de los padres. El proyecto escolar se suma así al buen arranque de la nueva piscina, que ronda los 320 usuarios y hasta la que se desplazan también vecinos de Fornells, Es Migjorn Gran, Ferreries y Alaior.