Mi compañero del Consistorio mahonés Miguel Torres y yo, estando en la oposición entre los años 2003 y 2007, vivimos de cerca el proyecto y construcción del pabellón municipal nuevo, sito en la Sínia Costabella, para el cambio de ubicación y continuar con la magnífica labor baloncestística del Club Deportivo Alcázar. Nuestra preocupación se basaba en el nombre con el que se "bautizaría" dicho pabellón, ya que nos parecía que lo suyo hubiera sido ponerle el nombre del fundador del Club Deportivo Alcázar, el padre Petrus (El pater).
Una persona muy unida al padre Petrus, me detalló alguno de los actos, actividades y actuaciones que realizó el reverendo Miguel Petrus Marqués:
"Por iniciativa propia y con la ayuda de donativos que solicitaba, adquirió la finca del Freginal para que la juventud de Mahón de la post guerra tuviera un lugar donde practicar deporte y otras actividades.
Cedió gratuitamente al Ayuntamiento dos casas (400 metros) para que pudiera abrirse una calle, la actual Ramón y Cajal. El sobrante de los terrenos los regaló al Obispado con la condición de que siempre se emplearían para usos deportivos o lúdicos.
Fundó el CD Alcázar, además de formar equipos de fútbol, atletismo, juegos de salón, etc, con sus pertinentes campeonatos, torneos y hasta consiguió que en el puerto de Mahón hubiese traineras.
Fue profesor en el Instituto Nacional de Enseñanza Media de Mahón y para los jóvenes que trabajaban pudieran seguir estudiando, creó el Bachillerato nocturno.
Asimismo, formó un grupo de profesores para que, junto a él, durante el verano dieran clases de repaso gratuitas a los que lo necesitasen.
Fue cura párroco de la Iglesia de San José y del Hospital Municipal, asistiendo, no solo a sus feligreses, sino también a todos los enfermos.
Fue organista de la iglesia de Santa Maria.
Formó el Grupo Musical San José, que además de dar conciertos en el Hospital para los enfermos y gente mayor, salían cada año acompañando a la Cofradía de la Sangre y consiguió que cada Navidad hubiese un encuentro de Corales Navideñas en la Iglesia de Santa Maria.
Dio clases gratuitas de música y solfeo, a los que no podían pagarlas.
Compró instrumentos musicales para regalar a los más necesitados, que destacaban musicalmente.
Compró un televisor de grandes dimensiones, para proyectar películas de vídeo, los sábados y festivos, para disfrute de la juventud. Además de varios juegos de salón (ajedrez, damas, ping-pong) y biblioteca, en el edificio anexo a la sacristía de la iglesia de San José.
Este televisor también era usado por los técnicos y entrenadores del CD Alcázar para enseñar a sus jugadores detalles de este deporte, o para cursillos de perfeccionamiento".
Curioso y apreciado lector, no puedo dar fe de lo comentado anteriormente pero estoy convencido de la veracidad de todo ello. En mi juventud una persona con sotana, gozaba de un notable prestigio entre la ciudadanía, en la actualidad hay quien quiere verlo como un estigma y solo por este perjuicio se cuestiona o se evita un reconocimiento transparente y merecido.
Quiero felicitar de todo corazón al Consistorio mahonés, por su decisión de nombrar al reverendo Miquel Petrus Marqués, Hijo Ilustre de nuestra ciudad. La memoria histórica solamente se usa políticamente según convenga y si no a los hechos.
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