Ha alcanzado el CE Mercadal esta pasada semana una efeméride maravillosa.
Desde el pasado día 12 puede presumir de sus 90 años de vida. Son nueve décadas de fútbol, prácticamente ininterrumpido en la localidad del centro de la Isla que coinciden con su época dorada en función de la alta categoría en la que milita su primer equipo desde hace un lustro. Tanto es así que, hoy por hoy, el Mercadal ostenta el honor de ser el club referente de la isla dados los descensos de Alaior y Ferreries, la desaparición del Sporting Mahonés y el ascenso del nobel, Penya Ciutadella. Pocos o ninguno podían imaginar el mapa actual del balompié menorquín hace una década con el Mercadal en la cima.
Este cumpleaños, que supone el preámbulo del centenario a la vuelta de la esquina, proporciona un orgullo incuestionable entre quienes dieron origen a la entidad, los que la mantuvieron en los años más delicados y aquellos más recientes que tuvieron el arrojo de ascender al equipo estandarte, por primera vez, a una Liga compensada. Todos, sin embargo, han contado con el respaldo del seguidor mercadalense, siempre fiel a sus colores.
Y es que la historia del CE Mercadal no se escribe a partir de la categoría en la que milita su primer equipo. Seguirá con vida el club rojiblanco sea cual sea su militancia el próximo año aunque su posible renuncia a la Tercera División supondría otro revés traumático para el deporte rey en nuestra Isla, tan golpeado en los últimos tiempos.
Quizás por ello, la advertencia hecha por el presidente, Toni Palliser, el pasado viernes en este diario debería ser tomada en cuenta ya no solo por la masa social mercadalense sino por los buenos amantes del fútbol insular que acuden a Sant Martí con cierta regularidad, como último reducto de la Tercera División en la zona centro levantina de Menorca.