El exhaustivo informe redactado por cinco técnicos del Ayuntamiento de Ciutadella ha detectado 66 deficiencias e irregularidades en las complejas obras de reforma y rehabilitación del Teatre des Born, iniciadas en 2011 y concluidas este año. Pero, en realidad, no pueden darse por terminadas cuando se observan graves desperfectos, instalaciones que no han sido concluidas e incluso actuaciones previstas y presupuestadas en el proyecto inicial que no han sido ejecutadas.
La historia se repite cuando el coliseo municipal aún no ha reabierto sus puertas, porque la anterior reforma -inaugurada por la Reina Doña Sofía en 1990- condujó al cierre del teatro en 2006. El arquitecto director de las obras debía haber demostrado mayor celo profesional y no podía declarar que no hay deficiencias.
El Ministerio de Cultura tampoco podía recepcionar Es Born sin una inspección mucho más rigurosa. Y el Ayuntamiento de Ciutadella, con una responsabilidad in vigilando, debería haber actuado de forma más activa. La concejal de Cultura, Auxiliadora Pons, recuerda que estas obras tienen garantía. Es el momento de exigirla y aplicarla sin más demora.