Tras haberse situado Més de Menorca fuera del Govern del Pacte, en desacuerdo con la dimisión forzada de la consellera Ruth Mateu por la adjudicación de contratos a dedo al jefe de la campaña electoral de Més per Mallorca, mañana en el Parlament la coalición menorquina escenificará su nuevo papel. Empezará a ejercer como oposición, aún cuando reitera que respetará los Acords de Governabilitat de junio de 2015, y formulará la primera pregunta en sede parlamentaria al Ejecutivo presidido por Armengol, que ahora ha quedado formado por PSIB-PSOEy Més Per Mallorca.
La cuestión que planteará se refiere al retraso en la apertura y entrada en funcionamiento de veinte plazas, ubicadas dentro del recinto hospitalario de Son Espases, para el alojamiento de enfermos de las islas menores y sus familiares, desplazados a Mallorca para recibir atención médica especializada.
El desmarque de Més per Menorca abre un nuevo escenario cuando el Pacte aún no ha alcanzado el ecuador de legislatura y tampoco está cerrada la crisis de los contratos, en manos de la Fiscalía Anticorrupción. Todo ello añade incertidumbre e inestabilidad política a un Govern en minoría parlamentaria.